Todo lo que debes saber sobre el pensamiento lateral

POR: VALERIA SABATER

¿Sabías que existe un tipo de pensamiento poco ortodoxo y no lineal que te ayuda a crear ideas innovadoras? Te contamos, a continuación, en qué consiste y cómo aplicarlo.

En la vida, en tus relaciones y entorno laboral, puedes resolver los problemas de dos maneras. La primera, mediante un razonamiento lógico, lineal y racional. La segunda, usando un enfoque al que el psicólogo y filósofo Edward De Bono denominó pensamiento lateral. Consiste en ofrecer soluciones innovadoras y reflexivas que van más allá del clásico procesamiento deductivo.

Pensar a través de la lateralidad es el sustrato de la creatividad y una habilidad que todos podemos potenciar. Es atreverse a sortear lo previsible para hacer de la imaginación y la intuición tus mejores aliadas. Toda empresa se beneficia de este tipo de mecanismo cognitivo y, por ello, te detallamos todo lo que deberías saber sobre esta esfera de poder.

«En el pensamiento lateral uno no busca la respuesta correcta, sino una disposición diferente de ver las cosas para poder ofrecer una respuesta innovadora, inesperada y práctica».

~ Edward De Bono (El pensamiento lateral: manual de creatividad, 1970) ~

Pensamiento lateral: definición y características

El pensamiento lateral es una forma de razonamiento que busca soluciones fuera de lo común y, a menudo, sorprendentes. En lugar de seguir una secuencia de pasos lineales o predecibles como el procesamiento lógico o vertical, se escapa de las reglas establecidas y aporta propuestas sencillas, pero extraordinarias.

Este concepto lo desarrolló el psicólogo maltés Edward De Bono en la década de 1960. Su libro, El pensamiento lateral: manual de creatividad (1970) fue toda una referencia en este campo. Esta manera de pensar, creativa e indirecta, da forma a grandes aportaciones, pero eso sí, el enfoque vertical y lateral no son excluyentes. Te explicamos sus características, a continuación.



Cuestionar suposiciones

El pensamiento lateral implica cuestionar las creencias subyacentes y esquemas rígidos que, a menudo, limitan el razonamiento convencional. Lo que hace es animarte al desafío, a dudar de lo que se suele dar por sentado para considerar nuevas perspectivas. Algo así te permitirá formar a ideas y solucionesprácticas, a la vez que muy eficaces.

Ejemplo

Un camión queda atascado debajo de un puente. Un grupo de sesudos técnicos piensan en alguna manera de retirar el vehículo de allí, sin dañar la propia estructura. Después de varias horas reflexionando en diversas ideas, llega un niño.

Gracias a su mirada curiosa y ajena a los convencionalismos, lo primero que hace es cuestionar todo lo que dicen los adultos. Después aporta su solución: basta con desinflar los neumáticos del camión.

No linealidad

El International Journal of Progressive Education destaca la necesidad de que las personas puedan pensar de manera diferente y estén abiertas a la innovación. Al fin y al cabo, en un entorno social tan complejo y competitivo como el actual, este recurso es una herramienta de transformación y gran utilidad. Y la buena noticia es que siempre estás a tiempo de desarrollarla.

Una de las características que te gustará tener en cuenta, es que no sigue una estructura rígida a la hora de razonar y procesar la información. A diferencia del pensamiento lógico o lineal, que aplica una secuencia de pasos predecibles, el lateral salta de una idea a otra de manera forma aleatoria. Ahí está su magia y potencial.

Ejemplo

Un hombre entra a un bar y pide un vaso de agua. El camarero busca debajo del mostrador, saca una pistola y lo apunta con ella. Después, este se despide dándole las gracias. ¿Qué es lo que ha pasado? ¿Ha intentado robarle? Para entenderlo, procura no aplicar un enfoque lineal y aplica la imaginación: el individuo tenía hipo y el propietario del local le ha prestado ayuda.

Exploración de múltiples perspectivas

Esta forma de pensar parte siempre de la exploración de múltiples enfoques y soluciones en paralelo. En lugar de limitarse a una sola ruta, el razonamiento lateral considera una variedad de posibilidades y conexiones. Estos serían algunos ejemplos de este enfoque cognitivo a la hora de resolver un problema:

  • Busca varias alternativas
  • No se queda con una única solución
  • Evalúa todos los flancos de un problema
  • Se sirve siempre de la curiosidad y de la imaginación
  • Aunque las resoluciones parezcan obvias, intenta ir un poco más allá

Ejemplo

Una empresaria debe buscar inversores para su negocio. Lo más habitual es procurar dar con personas que ya conozca y que confíen en ella. Sin embargo, decide dar el salto y buscar en otros países haciendo presentaciones originales y desafiantes de sus ideas.

Genera ideas divergentes

Otro de sus rasgos particulares es generar una amplia gama de ideas, a menudo extrañas o poco convencionales. Las personas que suelen usar esta metodología de pensamiento, saben que, a la hora de resolver un problema, es clave aportar muchas ideas singulares y, a veces, hasta estrambóticas. La evaluación posterior será la que elija la idea más útil.

Ejemplo

Dos mujeres se presentaron ante el rey Salomón, afirmando ser madre del mismo niño. Para resolver tal conflicto, el soberano propuso dividir al niño en dos mitades, dándole a cada mujer una de las partes. Al instante, la auténtica progenitora renunció a reclamar al pequeño con el fin de salvar su vida. La duda quedó resuelta.

Reconoce patrones de pensamiento (metacognición)

Tal y como explican en la revista Science of Learning, la metacognición es la capacidad que tenemos las personas de ser conscientes de cómo pensamos para regular este proceso. Te interesará saber que el razonamiento lateral se preocupa por monitorizar el propio pensamiento y detectar algún tipo sesgo cognitivo. 

Ejemplo

Un padre le propone a su hija que solucione el siguiente enigma: «un hombre arrastra su coche hasta un hotel y, entonces, descubre que está en bancarrota. ¿Cómo es posible?». La niña sabe que su progenitor le plantea siempre retos muy imaginativos.

Contiene su impulsividad y evita, ante todo, decir lo primero que le venga a la mente. Monitoriza su forma de procesar la información, esforzándose por encontrar una respuesta lo más original posible. Hasta que la obtiene: «En realidad, ese hombre está jugando al Monopoly».

¿Qué utilidad tiene este tipo de pensamiento?

Edward De Bono definió este tipo de pensamiento enfatizando su gran utilidad para la sociedad. Desarrollar esta técnica permite que las personas aborden los problemas desde distintos puntos de vista. Algo así actúa como disparador del cambio, como ejercicio de transformación social y herramienta de bienestar. Veamos sus finalidades:

  • Desarrollo personal: practicar este tipo de razonamiento optimiza mucho más tus habilidades de resolución de problemas, fomenta la creatividad y expande tu mente.
  • Innovación empresarial: estimula la innovación, ayuda a identificar nuevas oportunidades de mercado y a encontrar formas más eficientes de abordar desafíos comerciales.
  • Resolución de problemas: este recurso cognitivo permite explorar una amplia gama de posibilidades y encontrar soluciones innovadoras, que quizás no fueron evidentes mediante enfoques más tradicionales.
  • Resolución de conflictos: en situaciones de adversidad o discrepancia, este pensamiento contribuye a encontrar soluciones alternativas que satisfagan a todas las partes involucradas, en lugar de adherirse a enfoques rígidos.
  • Generación de ideas para proyectos: si trabajas en un proyecto creativo, como el desarrollo de un producto, la planificación de un evento o la creación de contenido, el pensamiento lateral resulta útil para generar ideas frescas y emocionantes.
  • Tomar decisiones informadas: ten en cuenta que esta herramienta ayuda a decidir aspectos trascendentes de tu vida diaria, al considerar diferentes perspectivas y enfoques. Te guiará para evaluar las opciones desde ángulos inusuales y tomar decisiones más informadas.
  • Creatividad: fomenta la creatividad al desafiar las limitaciones del pensamiento convencional y al alentar la generación de ideas novedosas. Es una herramienta valiosa para la innovación en campos como el arte, el diseño, la publicidad, la tecnología, las artes, la ciencia, etc.

¿Cómo se aplica en las empresas?

El razonamiento lateral es el pilar que edifica el éxito de cualquier organización. Pero la clave está en cómo aplicarlo y saber vertebrar esta esfera en todo el capital humano. La revista European Research on Management and Business Economics describe algo llamativo en esta materia. Es obvio que resulta esencial digitalizar a toda empresa para mejorar su desempeño.

Ahora bien, las nuevas tecnologías deben acompañarse siempre de una estrategia con base en la innovación y la creatividad para favorecer su auténtico avance. En este punto, la lateralidad cognitiva actuará como el mejor aliado para los equipos. Te describimos cómo puede introducirse en el día a día:

  • Incentivos para la creatividad: ofrecer refuerzos, premios y reconocimientos a las ideas innovadoras, creará un ambiente donde se fomente la originalidad.
  • Lluvias de ideas: basada en alentar a los empleados a que generen propuestas sin restricciones y a pensar de manera no convencional, esta técnica resulta siempre muy útil.
  • Estudio de casos exitosos: estudiar casos de empresas que han utilizado con éxito el pensamiento lateral para resolver problemas o innovar en su industria, puede servir como inspiración.
  • Equipos multidisciplinarios: formar equipos de trabajo entrenados en diferentes habilidades, trae diversidad y la oportunidad de tener siempre diferentes perspectivas para un mismo problema.
  • Ejemplos y proyectos piloto: realizar proyectos piloto o experimentos sustentados en ideas generadas a través del pensamiento innovador, conduce a las empresas probar nuevas soluciones antes de implementarlas a gran escala.
  • Técnicas de creatividad: nunca está de más que, desde recursos humanos o mentores especializados, enseñen a los empleados estrategias específicas de creatividad, como la técnica de los 6 sombreros para pensar de Edward De Bono.
  • Técnicas de resolución de problemas: como ya señalamos, este recurso es muy útil para la resolución de conflictos. Habilitar a las personas para abordar los desafíos, discrepancias y problemas interpersonales, es un ejercicio básico y esencial.


Pensar de forma lateral, una herramienta de poder

En un mundo lleno de desafíos y oportunidades, la lateralidad cognitiva brilla como un faro en todo entorno social. Gracias a esta estrategia, iluminas caminos no convencionales para revelar soluciones sorprendentes.

Al liberarte de las cadenas de la lógica convencional, abrirás las puertas a la creatividad, a la innovación y la posibilidad de cambiar el mundo de formas inesperadas.

Procura entrenar este enfoque y mirada interna que combina el atrevimiento y el desafío. Asimismo, ten presente que pensar de manera lateral, no está reñido con razonar de forma vertical. Ambos recursos pueden aplicarse de manera combinada para llegar a ideas excepcionales, útiles y novedosas. ¿Te animas?

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/pensamiento-lateral/

¿Qué son los pensamientos intrusivos y cómo manejarlos?

POR: GLORIA REDONDO

Los pensamientos intrusivos son no deseados, perturbadores e imprevistos. Indaguemos todo sobre esas angustias que empañan tu calidad de vida, así como algunos trucos para tratar las ideas negativas que te roban la paz.

Trasládate a este escenario: quieres cruzar la calle, pero te angustia que un automóvil te atropelle. O no sales de casa los martes, por temor a que justo ese día pase algo trágico. Los pensamientos intrusivos son motivo de preocupación para muchas personas. Sentir que la parte racional se apodera de todas las parcelas de la vida, hasta el punto de gobernarlas por completo, no es para nada agradable.

A pesar de estar extendidos en la población general, estas ideas muy pocas veces son consultadas. La vergüenza o el creer que son normales hacen que la gente viva con ellas y acabe resignada al malestar.

Sin embargo, esto no debería ser así, ya que tratarlas mejora el estado de ánimo y la calidad de vida. Por ello, te explicamos qué son y cómo se tratan estas obsesiones.

¿Qué son los pensamientos intrusivos?

Pensar de modo intrusivo es darle cabida a ideas o imágenes, la mayor parte del tiempo de carácter perturbador o angustiante, que vienen a tu mente sin previo aviso. Su naturaleza es muy variable; los temas más comunes son, entre otros, recuerdos del pasado, actos de violencia, actos sexuales y comportamientos socialmente inaceptables.

En general, los pensamientos no dejan de ser, al fin y al cabo, productos psíquicos, cosas que nuestra mente produce sin que muchas veces seamos conscientes del porqué. A lo largo de un solo día tenemos decenas. Y la mayoría, tal y como vienen, desaparecen y no volvemos a acordarnos.

No obstante, hay una pequeña cantidad que no se va y que se instala por mucho tiempo. Tales reflexiones reemplazan a las ideas principales hasta que nuestro estado mental se perturba. Y se mantienen por la importancia que solemos darle: si la idea es repetitiva y le decimos al cerebro que es relevante, ahí continuará.

Por qué aparecen estas ideas angustiantes

Los orígenes de los pensamientos angustiosos son múltiples y no suceden igual en todas las personas que los desarrollan. Aun así, es cierto que en muchos casos se puede observar un proceso, o un patrón repetitivo con peculiaridades en cada quien, que nos ayuda a entender mejor la raíz de estas cogniciones.

Hay situaciones en las que un disparador externo (un estresor) es el detonante, pero no es lo frecuente. Normalmente, no es posible establecer una causa externa; el origen se sitúa en la misma evaluación que la persona hace de sus pensamientos y la importancia que les otorga. 

Lo habitual es que se presenten en individuos con alto sentido de la responsabilidad y el deber. Un pensamiento que aparece de manera casual y fortuita no se trata como tal, sino todo lo contrario. La persona empieza a sobrestimar su relevancia y a tenerlo más presente; así crea un bucle racional del que es muy difícil desprenderse.



Características de los pensamientos intrusivos

En definitiva, las características que tienen en común estos pensamientos egodistónicos y negativos son las siguientes:

  • Recurrentes: vuelven una y otra vez sin modificarse.
  • Desagradables: su contenido es aversivo o genera emociones negativas.
  • Improductivos: no nos ayudan para planificar y ordenar las tareas del día a día.
  • Obstaculizadores: dificultan la concentración, memoria y otros procesos cognitivos.
  • Repentinos: aparecen de forma súbita sin poder identificar un desencadenante.
  • Incontrolables: los esfuerzos para dejar de pensar son inútiles, incluso tienen el efecto contrario.

De acuerdo con un estudio divulgado en Journal of Obsessive-Compulsive and Related Disorderscasi el 94 % de las personas tienen pensamientos intrusivos con regularidad. La investigación evaluó su presencia en seis continentes y tuvo en cuenta los episodios durante los últimos tres meses. Por tanto, su manifestación está en todas las culturas.

Pensamientos obsesivos y trastornos mentales

Es cierto que tal clase de ideas obsesivas son algo extendido entre la población. Se asume como regla que todos tuvimos o tendremos alguna. Pero el impacto de estas llega a ser patológica.

De hecho, se trata del núcleo de trastornos mentales como la ansiedad generalizada o el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Lo que comparten ambos es que el malestar se centra en la preocupación o rumia que se percibe como invasiva e incontrolable. Cuando es así, son más un síntoma que un episodio pasajero.

Por otra parte, estas angustias pueden desarrollarse también en trastornos alimentarios, trastorno de estrés postraumático, depresión (hasta la depresión posparto) y en lesiones cerebrales traumáticas. De nuevo, en tales casos acompañan a otros síntomas; así que de forma aislada no son indicadores de estas condiciones.

Ejemplos de pensamientos intrusivos

Una situación de lo más normal puede desencadenar en una idea obsesiva, generando la relación entre un pensamiento intrusivo y la ansiedad. ¿Qué situaciones serían estas? Mira, a continuación, los ejemplos más comunes que te presentamos:

  • Místicos o religiosos: imaginar escenas contrarias a lo que predica tu religión y sentir que por eso pecas.
  • Relacionados con acontecimientos traumáticos: recordar algún hecho del pasado que te haga sentir miedo o angustia.
  • Supersticiosos: creer que por pensar en un acontecimiento malo pasará. O que si no tienes un determinado pensamiento, algo horrible ocurrirá.
  • De daño a los demás: ir por la calle y pensar que harás daño a otra persona, que sufrirás una pérdida de control y agredirás a alguien allegado, aunque jamás haya sido tu intención.
  • Sexuales: objetar tu orientación o preferencias sexuales, pese a no tener dudas previas. Se suma el miedo a cometer algún acto sexual ilegal, a conocer a una amistad de tu pareja y pensar que le gustarás o que te gustará.
  • Vinculados con la salud: el temor a padecer una enfermedad grave, creer que sufrirás un accidente o que ocurrirá algo malo en un determinado día o dudar sobre tu salud mental, cuestionando si en algún momento sufrirás un trastorno o si ya lo sufres y no lo sabes.

¿Cómo controlar los pensamientos intrusivos?

En cuanto al manejo de las ideas intrusivas, hay dos corrientes de tratamiento: aquellas que se enfocan en desactivar los pensamientos negativos y las que enseñan a convivir con ellos y relacionarnos de otra manera. Como dijimos antes, una de sus características más básicas es que son incontrolables. Parece paradójico, pero cuanto más se esfuerza uno por no pensar, más fuerte se hace la idea.

Por ejemplo, reflexiona por un momento en un elefante rosa. Ahora trata de quitarte esa imagen de la cabeza: aunque intentas eliminarla, más nítida aparece en tu conciencia.

En razón de ello, los métodos supresores de cogniciones tienen una eficacia limitada. En su lugar, resultan más interesantes aquellas técnicas que nos permiten aceptar los pensamientos y tratarlos como lo que son: un producto casual de nuestra mente.

La defusión cognitiva pretende ese mismo objetivo. Esta herramienta, cuyos orígenes se sitúan en la terapia de aceptación y compromiso (ACT, por sus siglas en inglés), trata de cambiar la relación con nuestros juicios. Son productos de la mente, pero que no reflejan la realidad.

De acuerdo con un estudio de la Universidad Autónoma de Madrid, la técnica de la defusión cognitiva resultó eficaz tanto para disminuir la cantidad de los pensamientos obsesivos, como el grado de malestar que estos provocaban.

Por ello, ante ideas intrusivas, considera que son como una nube: están en el cielo y a veces impiden ver el sol, pero más tarde se moverán y desaparecerán. Otros trucos que ayudan son los que ahora te compartimos.

Dormir suficientes horas

Uno de los mejores remedios cuando no se puede detener la mente es esforzarse por dormir más horas. La falta de descanso es un factor que propicia los pensamientos obsesivos. Y no solo eso, sino que, a menor cantidad de horas de sueño, más angustiosos y reales parecen. Por ello, cuidar tu descanso te ayudará a estar de mejor humor y relativizar las cosas. 

Hablar de las preocupaciones con gente cercana

Tener preocupaciones y no exteriorizarlas es agobiante. Se siente como una olla a presión, en la que los gases son los pensamientos que ejercen presión sobre la olla, es decir, la cabeza. Poner en palabras los pensamientos disminuye dicha presión. Y el apoyo de los demás nos consuela y alivia.

Ensayar técnicas de respiración para rebajar el nivel de angustia

Otra solución contra el pensar negativo es incidir directo en la angustia que provocan estas ideas. En ocasiones, se forma un bucle entre pensamientos y malestar en el que ambos se retroalimentan.

En este sentido, las técnicas de respiración contribuyen en bajar la ansiedad, sobre todo en el plano físico. Respirar de forma tranquila disminuye tanto las pulsaciones como la velocidad de la cabeza.

Tener aficiones enriquecedoras para relajar la mente y distraerse

No hay que olvidar el impacto positivo que tienen las aficiones y actividades agradables sobre la salud mental. Distraerse con algo que te guste es una forma eficaz de librarte de los pensamientos desagradables. Además, relaja la mente y tu humor se volverá más positivo. Prueba con leer, hacer ejercicio, pintar o escribir.

Si las ideas obsesivas no desaparecen, ten en cuenta que un profesional de la salud mental te ofrece las herramientas para canalizarlos. No dudes en pedir ayuda.



Hay que cambiar la forma de mirar los pensamientos desagradables

La cabeza, como cualquier parte del cuerpo, necesita su descanso. Las preocupaciones y rumiaciones dificultan parar y, en muchas ocasiones, son el origen de sufrimiento psíquico. Inclusive, en la mayoría de los casos, lo que provoca el malestar no es tanto lo que nos pasa, sino la manera de reflexionar sobre ello.

A pesar de lo anterior, no debes desesperarte o perder la calma si los pensamientos te resultan molestos. El truco es aprender a convivir con estas ideas y darles el espacio justo que se merecen, para tener una mejor calidad de vida.

En definitiva, hay que evitar entrar en la lucha, porque, al fin y al cabo, es una pelea contra uno mismo de la que siempre se sale herido. Ten en cuenta todo esto y cambia el enfoque de mirar lo que te asusta de ti, seguro aprenderás cosas que jamás te has parado a contemplar.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/que-son-los-pensamientos-intrusivos/

¿Cuál es la importancia de la motivación en el deporte?

POR: GLORIA REDONDO

Si hay un factor mental bien estudiado como facilitador del rendimiento deportivo es la motivación; ella ayuda a no desmayar ante los obstáculos. Conoce aquí todas las razones para tenerla en cuenta en los entrenamientos. 

No todos los días nos levantamos con ganas de ejercitarnos, aunque debamos hacerlo por gusto, porque nos apasiona una disciplina o porque así lo recomendó el médico. Y no siempre se trata de un asunto de cansancio. Hay procesos básicos mentales que influyen en ello; entre estas variables destaca la motivación como un pilar fundamental en el deporte.

Más allá de conseguir resultados, el entusiasmo es crucial para comprometerse con el entrenamiento. Por tanto, potenciando las ganas tendremos un mejor rendimiento en las rutinas y en competiciones. 

Si prácticas alguna disciplina y quieres aumentar tus progresos, sigue leyendo y descubre la importancia estar motivado/a, así como consejos para ponerlo en marcha.

«Por muy fuertes que sean mis piernas, es mi mente la que me convierte en un campeón».

Qué es la motivación en el deporte

Existen muchísimas frases deportivas de motivación e inspiración, pero la mejor metáfora que ejemplifica esta energía es la gasolina de los coches. El combustible es necesario para que el motor arranque y funcione. Entonces, la motivación es la gasolina que alimenta la conducta.

Esta es la variable responsable del inicio y mantenimiento de las acciones. Sin motivación no hay impulso para hacer un esfuerzo o para mantenerlo en el tiempo, a pesar de los obstáculos. En el ámbito deportivo es fundamental esforzarse para progresar, de ahí la relevancia motivacional para obtener resultados.

¿Pero cuáles son los principales aspectos que motivan a los deportistas? En este proceso se consideran los siguientes factores, relacionados con la motivación intrínseca y extrínseca en el deporte:

  • Individuales: los gustos, preferencias e ideologías que nos hacen acercarnos a lo que nos agrada y huir de lo que nos desagrada.
  • Sociales: la compañía de los demás, su aprobación o formar parte de un grupo es un refuerzo valioso y hacia lo que nos orientamos.
  • Materiales: hacer algo para obtener una recompensa. Un ejemplo sería trabajar duro para ganar trofeos, medallas, dinero, reconocimiento público, etc.


Importancia de la motivación en el deporte

La actividad deportiva no se ciñe solo a los resultados físicos o materiales (si es que supone compensaciones económicas); también tiene que ver con la constancia, la superación y la confianza. Como señala la psicología del deporte, son varios los elementos que influyen en el rendimiento de un atleta.

A partir de esto, y considerando la definición anterior, ahora pasaremos a explicar en profundidad por qué es tan relevante motivarse en el ámbito deportivo.

1. Hace que persistas a pesar de las dificultades

Si hay algo que caracteriza la trayectoria deportiva de cualquier atleta, son las dificultades a las que tiene que hacer frente. Estas no se suelen ver, tan solo nos llegan los triunfos y los momentos positivos, pero, en ocasiones, los inconvenientes son tan grandes que la persona se plantea abandonar.

Motivación y compromiso son dos variables que van de la mano. Cuanto más sólida sea la primera, la segunda será mayor. Y la misma relación se aplica a la inversa.

¿Cómo se puede trabajar el compromiso con el ejercicio físico? Dándole el espacio que se merece en la rutina del día a día. Programar un momento para dedicárselo al deporte, hará que sea más fácil organizar el resto de tareas sin que invadan el tiempo libre.

2. Clarifica tus objetivos y moviliza a luchar por conseguirlos

Una diferencia entre los deportistas profesionales y los amateurs es que los primeros tienen bien claros qué objetivos quieren conseguir. Los principiantes suelen contar con una idea vaga, poco estructurada. Además, tampoco acostumbran a plantearse metas a corto, medio y largo plazo, y reevaluarlas constantemente.

No obstante, el establecimiento de objetivos es una táctica que todos los deportistas deberían poner en práctica. En este sentido, un estudio de la Universidad Autónoma de Barcelona resalta que el establecimiento de metas es una herramienta útil para elevar la motivación y la percepción de autoeficacia de los deportistas, mejorando así su rendimiento.

Con todo esto, ¿cómo deben ser nuestros objetivos? El acrónimo SMART nos da las claves para maximizar la probabilidad de éxito:

  • S: específicos. Tienen que estar definidos de manera concreta y operativa.
  • M: medibles en una dimensión o escala objetiva que nos permita evaluar si avanzamos en la dirección correcta.
  • A: alcanzables dentro de nuestras capacidades.
  • R: relevantes, o pertinentes, para conseguir un propósito a largo plazo más significativo.
  • T: temporalizados. Debemos fijar para cada objetivo un tiempo límite en el cual cumplirlo.

3. Favorece la cohesión de grupo

Hasta aquí nos hemos centrado en explicar la importancia de la motivación deportiva desde una perspectiva individualista, pero en los deportes de equipotambién tiene su función.

El impulso entendido de forma grupal es el esfuerzo que hacen los miembros del grupo en la misma dirección para alcanzar una meta en común. Por ejemplo, en un equipo de fútbol, aunque cada uno tenga su posición y su tarea, al final todos trabajan de manera ordenada para ganar un partido.

De acuerdo con un artículo de la Universidad de Extremadura, la motivación es una de las condiciones que los gestores deportivos tienen en cuenta para aumentar el sentimiento grupal. La explicación radica en que el equipo se orienta a trabajar en conjunto cuando existe unión entre los jugadores.

Si estos dos factores forman un binomio, todo el trabajo destinado a potenciar una, tendrá efectos positivos sobre la otra. ¿Cómo se trabaja entonces la cohesión? Mediante dinámicas de equipo en las que los deportistas aprendan a cooperar con sus compañeros para alcanzar una meta en común.



4. Da un extra a tus capacidades físicas

Entender la parte física separada de la mental es un error, pues somos un solo cuerpo. Las capacidades motrices están estrechamente relacionadas con las mentales, por lo que a la hora de entrenar hay que considerarlas y no solo centrarse en la fuerza o la resistencia.

En relación con la motivación en concreto, un deportista que tiene claros sus objetivos aguantará más el esfuerzo físico y el dolor. Esto no quiere decir que no sienta cansancio o incomodidad, pero tiene un mayor margen para soportarlo. Incluso, valorará el cansancio de manera positiva, como un incentivo para seguir luchando.

Consejos para incrementar la motivación deportiva

El entrenamiento mental tiene que ser diario. Un error habitual en el deporte es solo preocuparse por la motivación justo antes de una competición significativa, dejándola de lado el resto de la temporada. Además, debes tener en cuenta varias estrategias para motivarte:

  • Reevalúa tus objetivos cada semana y ajusta aquellos que te cuesta más cumplir.
  • Tendrás días buenos y malos, pero estos últimos te permiten poner en práctica lo aprendido en los buenos.
  • El establecimiento de objetivos es la herramienta más eficaz y fácil de aplicar. Considéralo para fijar metas a corto, medio y largo plazo.
  • Es importante tanto el ritmo como las formas. Por tanto, sé constante y trabájalos todos los días, al igual que haces con la preparación física.

Con todo esto, si quieres ver los progresos y que tus avances no se detengan, toma nota de tales puntos y empieza por incorporar el entrenamiento de la motivación en el deporte.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/importancia-de-la-motivacion-en-el-deporte/