Hackear el cerebro para cambiar la personalidad, ya es posible

POR: FRANCISCO MARÍA

La posibilidad de modificar el cerebro de una persona y cambiar su personalidad ha dejado de ser solo un relato de ciencia ficción. La llamada lateralización del cerebro y la manera de influir en algunas de sus partes y cambiar algunos comportamientos, es totalmente factible en la actualidad. Por ejemplo, “hackear” el cerebro puede aumentar la confianza y mejorar el rendimiento mental. ¿Pero cómo se consigue llevar a la práctica estos complejos procesos? Aquí te contamos más datos sobre lo que debes saber sobre ello.

La neuro modulación ya es una realidad

Según James J. Hughes, director del Institute for Ethics and Emerging Technologies (IEET), la ciencia puede cambiar la forma en que sienten, piensan o en la forma en que se comportan los seres humanos.

En la actualidad, y como hace siglos lo ha estado haciendo la humanidad, se continúa intentando mejorar las capacidades cognitivas mediante la intervención de diferentes tipos de medicamentos.

Otro método utilizado frecuentemente aplica una corriente eléctrica de baja intensidad a ciertas partes del cerebro, o genera cierto campo magnético a determinada región.

Un método más moderno utiliza chips, que, incorporados al cerebro le estimulan eléctricamente. 

La ventaja de la neuro modulación es que puede dirigirse con mucha precisión a las partes del cerebro específicamente relacionadas con ciertos rasgos o sensaciones de la personalidad.

Aplicación médica práctica

Es posible, por ejemplo, implantar electrodos en el nervio vago, el más largo y complejo de los nervios craneales, para que pueda ser estimulado.

Este nervio tiene una influencia extremadamente importante tanto en la presión arterial como en la frecuencia cardíaca. Los electrodos también se pueden instalar directamente en el cerebro, a lo que se denomina “estimulación cerebral profunda” (DBS),

Según Hughes, una intervención de neurocirugía puede dar óptimos resultados si se instalan los electrodos profundamente. El chip es capaz de crear una cascada eléctrica que influirá en más de cien mil neuronas.

La oxitocina sintética, por ejemplo, aumenta el nivel de confianza de las personas, reduce la agitación e incrementa el enfoque en las tareas que se quieren realizar.

Sin embargo, indica Hughes, que el uso de este tipo de drogas tiene consecuencias morales en los comportamientos de las personas. En realidad, es el abuso de consumo que conlleva las alteraciones que, en última instancia, afectan a todo el organismo, o al menos a gran parte de él.

La doctora Tara Swart, neurocientífica y entrenadora de liderazgo y profesora del MIT, ayuda a personas a hackear deliberadamente sus cerebros para lograr resiliencia mental y un máximo de rendimiento.

Su estrategia se basa en una mejor forma de controlar el estrés, regular las emociones y retener información. Deja un comentario sobre este tema o comparte esta noticia en tus redes sociales.

Cómo mantener el cerebro joven con el ejercicio físico

POR: BLANCA ESPADA

El cerebro es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano, ya que controla todas las funciones vitales, desde la respiración hasta el pensamiento. Sin embargo, el cerebro también es uno de los órganos más vulnerables al paso del tiempo, ya que sufre cambios estructurales y funcionales que pueden afectar a la memoria, la atención, el aprendizaje y otras habilidades cognitivas. Por eso, es fundamental cuidar la salud del cerebro y prevenir o retrasar el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento. Una de las formas más sencillas y efectivas de hacerlo es mediante el ejercicio físico, que tiene múltiples beneficios para el cerebro, tanto a nivel físico como mental.

Cómo mantener el cerebro joven con el ejercicio físico

Un estudio reciente ha arrojado luz sobre la importancia del ejercicio físico para tener siempre un cerebro en forma. La investigación, titulada «Physical activity and brain volumes: The Cardiovascular Health Study» y publicada en la revista Neurology en 2021, analizó los datos de 10.163 personas de entre 65 y 99 años que formaban parte de un estudio longitudinal sobre la salud cardiovascular.

Los participantes fueron divididos en cuatro grupos según el nivel de actividad física que reportaron: sedentario, bajo, moderado y alto. La actividad física incluía tanto ejercicios aeróbicos como de fuerza, así como actividades cotidianas como caminar, subir escaleras, hacer jardinería, etc. Los investigadores utilizaron imágenes de resonancia magnética para medir el volumen de varias regiones del cerebro, como la materia gris, la materia blanca, el hipocampo, el lóbulo temporal, el lóbulo frontal y el lóbulo parietal.

Los resultados del estudio mostraron que los participantes que realizaban actividad física moderada o alta tenían mayores volúmenes cerebrales que los que realizaban actividad física baja o sedentaria, lo que sugiere que el ejercicio físico puede proteger el cerebro del encogimiento y la pérdida de neuronas que ocurren con el envejecimiento. Además, los participantes que caminaban al menos 4.000 pasos al día tenían un mayor volumen del hipocampo, una región del cerebro clave para la memoria y el aprendizaje, que los que caminaban menos. Estos hallazgos apoyan la idea de que el ejercicio físico puede mejorar la función cognitiva y prevenir o retrasar el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

¿Qué tipo y cantidad de ejercicio físico es el más beneficioso para el cerebro?

El estudio no especifica qué tipo de ejercicio físico es el más adecuado para el cerebro, pero los expertos coinciden en que cualquier actividad que aumente el ritmo cardíaco y la circulación sanguínea puede tener efectos positivos. El ejercicio físico mejora el suministro de oxígeno y nutrientes al cerebro,estimula la producción de nuevas células cerebrales y conexiones neuronales, libera hormonas y neurotransmisores que mejoran el estado de ánimo y el bienestar, y reduce el estrés y la inflamación, que son factores de riesgo para el deterioro cognitivo.

La cantidad de ejercicio físico que se necesita para obtener estos beneficios puede variar según la edad, el estado de salud y el nivel de forma física de cada persona, pero el estudio sugiere que incluso niveles moderados de actividad física, como menos de 4.000 pasos al día, pueden tener impactos positivos en el cerebro, lo que sugiere que metas menos ambiciosas que los tradicionales 10.000 pasos aún pueden generar beneficios significativos. Sin embargo, los expertos recomiendan realizar al menos 150 minutos de ejercicio físico moderado a intenso por semana, combinando actividades aeróbicas y de fuerza, para obtener los máximos beneficios para la salud general y el cerebro.

Consejos para incorporar el ejercicio físico en la rutina diaria

Aunque los beneficios del ejercicio físico para el cerebro son evidentes, muchas personas encuentran difícil incorporar el ejercicio físico en su rutina diaria, ya sea por falta de tiempo, de motivación, de recursos o de hábito. Sin embargo, existen algunas estrategias que pueden facilitar el proceso y hacerlo más divertido y satisfactorio. Algunas de ellas son:

  • Elegir una actividad que se adapte a las preferencias, capacidades y objetivos de cada uno, ya sea caminar, correr, nadar, bailar, hacer yoga, etc.
  • Buscar un compañero o un grupo de ejercicio que proporcione apoyo, ánimo y compañía.
  • Establecer metas realistas y progresivas, y celebrar los logros y los avances.
    Incorporar el ejercicio físico en las actividades cotidianas, como subir escaleras, ir al trabajo o a la compra caminando o en bicicleta, hacer pausas activas durante el día, etc.
  • Variar el tipo, la intensidad y la duración del ejercicio físico para evitar el aburrimiento y el estancamiento.
  • Combinar el ejercicio físico con otras actividades que estimulen el cerebro, como leer, aprender algo nuevo, escuchar música, resolver acertijos, etc.El ejercicio físico es una de las mejores formas de mantener el cerebro joven y saludable, ya que favorece el aumento del tamaño de las regiones cerebrales, mejora la función cognitiva y previene o retrasa el deterioro cognitivo. No es necesario entrenar mucho para obtener resultados positivos, sino que basta con realizar actividad física moderada de forma regular, como caminar o practicar algún deporte. El ejercicio físico no solo beneficia al cerebro, sino también al cuerpo y al estado de ánimo, por lo que se recomienda incorporarlo en la rutina diaria de forma divertida y variada.

FUENTE: https://okdiario.com/lifestyle/como-mantener-cerebro-joven-ejercicio-fisico-12192083

NESTOR BRAIDOT

Todo está inscrito en nuestro cerebro: la capacidad de sentir y pensar, de emocionarnos y razonar, de aprender y memorizar, de enamorarnos y olvidar. Por eso, el cerebro es un órgano que debemos cuidar más que cualquier otro. Néstor Braidot.