Reducir el riesgo de demencia temprana: Nuevos factores que podrían influir en la prevención

FUENTE: https://www.consalud.es/pacientes/pacientes-avances/reducir-riesgo-demencia-temprana-nuevos-factores-podrian-influir-en-prevencion_138343_102.html

Una investigación ha identificado un amplio abanico de factores del riesgo de demencia juvenil cuyos resultados cuestionan la idea de que la genética sea el único origen de la enfermedad. De esta manera, sientan las bases de las nuevas estrategias de prevención, tal y como publican desde la revista “JAMA Neurology”.

DEMENCIA

La demencia precoz es una patología que afecta alrededor de 370.000 personas cada año. Aunque las investigaciones han sido escasas, parece que se acaba de abrir una nueva línea de investigación que podría cambiar las acciones de prevención.

Este síndrome afecta a la memoria, el lenguaje, juicio y capacidad de orientación, así como de comprsión. Las lesiones que afectan al cerebro son el origen de esta enfermedad que altera significativamente la calidad de vida.

ESTUDIO

El estudio ha sido llevado a cabo por la Universidad de Exeter en reino Unido y la Universidad de Maastricht en Países Bajos. Y ha tenido la participación de hasta 350.000 participantes menores de 65 años a los que se les ha realizado un seguimiento. La investigación de UK Biobank evaluó una amplia gama de factores de riesgo, con predisposiciones genéticas hasta las influencias ambientales o relacionadas con el estilo de vida.

Entre las conclusiones del estudio, se descubrieron hasta 15 factores de riesgo, similares a los de la demencia tardía. Además, por primera vez en las líneas de investigación, se ha presentado la posibilidad de reducir el riesgo de demencia temprana a través de los factores relacionados con la salud y el estilo de vida.

“Se suele suponer que la causa es genética, pero en muchos casos no sabemos exactamente cuál es”

Entre algunos de los factores que elevan significativamente el riesgo de demencia temprana encontraron:

-Menor educación formal

-Un nivel socioeconómico más bajo

-Variaciones genéticas

-Consumo de alcohol y el aislamiento social

Carencia de vitamina D

-La depresión

-Los accidentes cerebrovasculares

-Las deficiencias auditivas

-Las cardiopatías

INTERVENCIÓN TEMPRANA

El profesor David Llewellyn, de la Universidad de Exeter destaca la importancia de los resultados para la actuación inmediata. Resaltando laposibilidad de intervención una vez delimitadas las causas de la demencia temprana.”Este estudio pionero ilustra el papel crucial de la colaboración internacional y los macrodatos para avanzar en el conocimiento de la demencia”, asegura el experto.

Es la primera vez que se demuestra la posibilidad de reducir los riesgos de padecer esta enfermedad a través de la actuación de múltiples -y distintos- factores. Y es que, el origen de estudiar otros factores nace de la gravedad que tiene sufrir esta enfermedad a una edad temprana. Como explica El doctor Stevie Hendriks, investigador de la Universidad de Maastricht: “La demencia de aparición temprana tiene consecuencias muy graves, porque las personas afectadas suelen seguir teniendo trabajo, hijos y una vida ajetreada”.

No obstante, ya había líneas de investigación que eran conocedoras de la existencia de factores de riesgo modificables que involucraban la forma física, el estado mental o el estrés crónico, así como la sociedad y la depresión, pero en demencia a edades avanzadas.

La doctora Leah Mursaleen, Jefa de Investigación Clínica de Alzheimer’s Research, y que cofinanció UK explica que “en los últimos años se ha llegado a un consenso cada vez mayor de que la demencia está relacionada con 12 factores de riesgo específicos modificables, como el tabaquismo, la presión arterial y la pérdida de audición. Ahora se acepta que hasta cuatro de cada 10 casos de demencia en el mundo están relacionados con estos factores”.

Desarrollan un posible nuevo tratamiento farmacológico para la esclerosis múltiple

FUENTE: https://www.consalud.es/tecnologia/avances/farmaco-molecula-pequena-podria-ser-proximo-tratamiento-esclerosis-multiple_138555_102.html

El Centro de Adicciones y Salud Mental (CAMH) de Canadá ha revelado unos estudios preclínicos que han llevado a cabo con un fármaco de molécula pequeña. Esta investigación ha resultado prometedora como posible nuevo tratamiento de la esclerosis múltiple (EM).

La revista “Science Advances” ha sido la elegida para publicar los resultados del estudio que se trata de una continuación del trabajo anterior de una de las investigadoras principales del CAMH, Fang Liu, quien identificó una nueva diana farmacológica para el tratamiento de la EM.

Liu y su equipo han creado ahora un compuesto de molécula pequeña que es eficaz en dos modelos animales diferentes de EM, este hallazgo supone un avance clave para la atención a los pacientes de esclerosis múltiple.

ESCLEROSIS MÚLTIPLE

La esclerosis múltiple es una enfermedad neurológica progresiva que actualmente no tiene cura. Entre sus síntomas, de carácter debilitante- se encuentran: los problemas de coordinación, cognición, debilidad muscular y depresión. Por razones desconocidas, las mujeres son afectadas en mayor medida que los hombres, y es más frecuente en las latitudes septentrionales.

“Espero que estos efectos se trasladen a la clínica para añadirse a los tratamientos actuales y aportar nuevas esperanzas a los pacientes con EM”

La mielina se ve dañada por el efecto de esta enfermedad, es la vaina protectora que se forma alrededor de los nervios del cerebro y la médula espinal. El desencadenante es la inflamación del sistema inmunitario, y por eso todos los tratamientos actuales para la EM se dirigen al sistema inmunitario.

LA INVESTIGACIÓN

Este nuevo enfoque de investigación se ha centrado en la actuación del sistema glutamato. Y es que los resultados del estudio han desvelado que el compuesto principal recién sintetizado reducía los síntomas de la EM, además de reparar la mielina dañada.

En palabras de Lui,”nuestro compuesto tuvo un efecto asombroso en el rescate de la mielina y la función motora en los modelos de laboratorio, y espero que estos efectos se trasladen a la clínica para añadirse a los tratamientos actuales y aportar nuevas esperanzas a los pacientes con EM”.

Además, la investigadora también aclara: “Al igual que ocurre con los cócteles de fármacos quimioterapéuticos contra el cáncer, la actuación simultánea sobre la vía de la enfermedad de la EM en múltiples puntos puede tener efectos sinérgicos y dar lugar a mejores resultados”.

Por otro lado, en la Universidad de Aberdeen (Escocia), el catedrático de Química Médica, Iain Greig, trabaja junto con su equipo para transformar las moléculas identificadas por Liu en moléculas avanzadas que sean “similares a fármacos” aptas para poder continuar con su desarrollo e implementar su uso clínico en pacientes.

“En todos mis años como químico medicinal, nunca he visto un punto de partida tan prometedor para un proyecto de desarrollo de fármacos. Ha sido un enorme placer participar en este programa y estoy deseando seguir impulsándolo hacia la clínica”, ha destacado Greig.

ENSAYOS EN HUMANOS, PRÓXIMAMENTE

Los siguientes pasos en el desarrollo del fármaco suponen más investigación preclínica, incluida la investigación de la seguridad y la estabilidad del compuesto. Unos pasos que, según Liu, piensa que tanto las pruebas de eficacia, como las de tolerabilidad, convierta el proyecto en un buen candidato para ser desarrollado para ensayos en humanos.

Mientras, el CAMH y la Universidad de Aberdeen han presentado solicitudes de patente para proteger esta investigación. Actualmente, se encuentran buscando de manera activa socios industriales para poder seguir avanzando en el desarrollo del fármaco de cara a realizar ensayos clínicos en los próximos años.

Descruben que el daño axonal es un biomarcador temprano de esclerosis múltiple

FUENTE: https://www.consalud.es/profesionales/descruben-dano-axonal-es-biomarcador-temprano-esclerosis-multiple_138765_102.html

Millones de personas en el mundo sufren esclerosis múltiple, una enfermedad crónica y autoinmune que afecta el sistema nervioso central y cuyos síntomas abarcan desde problemas de movilidad hasta dificultades cognitivas. Si bien la esclerosis múltiple afecta primariamente a la mielina de forma focal, un aspecto crucial de esta enfermedad, aunque a menudo el menos comprendido, es el daño axonal difuso, que puede estar asociado a la discapacidad permanente. Los axones son las extensiones de las células nerviosas que transmiten señales eléctricas entre las neuronas, lo que permite que se comuniquen correctamente. Este aspecto es sumamente importante, porque cuando falla la comunicación entre neuronas, el sistema nervioso no puede desarrollar sus funciones con normalidad. 

Con el objetivo de determinar si el aumento del tamaño de los axones puede ser un biomarcador temprano de la esclerosis múltiple, la investigadora Silvia De Santis, que lidera el laboratorio Biomarcadores de Imaging Traslacional en el Instituto de Neurociencias (IN), centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones científicas (CSIC) y la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, ha dirigido un estudio conjunto con el Centro Athinoula A. Martinos de Imágenes Biomédicas del Hospital General de Massachusetts (Boston, EE.UU.) en el que han conseguido detectar el daño axonal en pacientes con esclerosis múltiple de forma no invasiva. Para llevar a cabo este trabajo, publicado en la revista eLife, los investigadores han utilizado la técnica de imagen por resonancia magnética (IRM) ponderada en la difusión de agua.

“Si imaginamos los axones como pequeños cables, hay que tener en cuenta que el diámetro de estos cables es aproximadamente de una micra, de ahí la complejidad del desafío”

Trabajos previos en modelos animales y en tejidos humanos post mortemapuntaban a que el aumento del tamaño de los axones podía ser un indicador del daño axonal, pero los investigadores han tenido que lidiar con un gran reto a nivel técnico: medir axones in vivo en humanos no es posible con las técnicas de imagen tradicionales. “Si imaginamos los axones como pequeños cables, hay que tener en cuenta que el diámetro de estos cables es aproximadamente de una micra, de ahí la complejidad del desafío”, explica Silvia De Santis.

Por ello, los investigadores han desarrollado un marco experimental para poder poner a prueba la capacidad de la imagen por resonancia magnética (MRI) ponderada en la difusión de agua para detectar el aumento del tamaño axonal que se asocia a la degeneración. Esta técnica tiene la capacidad única de obtener imágenes de la microestructura cerebral in vivo de forma no invasiva y con alta resolución, al capturar el movimiento aleatorio de las moléculas de agua en el cerebro en las diferentes células y estructuras.

“Inyectamos una neurotoxina en una zona concreta del cerebro de la rata y generamos un aumento del tamaño de los axones de manera controlada”

Los investigadores confirmaron que, efectivamente, la MRI tiene la capacidad de detectar cambios en el tamaño de los axones asociados a la fase aguda del daño axonal. El primer paso para comprobarlo fue el diseño de un modelo animal: “Realizamos una cirugía en la que inyectamos una neurotoxina en una zona concreta del cerebro de la rata y generamos un aumento del tamaño de los axones de manera controlada”, explica el investigador Antonio Cerdán Cerdán, primer autor del artículo. El aumento del tamaño en los axones se midió mediante MRI y utilizaron técnicas histológicas, como la inmunohistoquímica o la microscopía electrónica, para validar estos resultados.

Finalmente, para medir el tamaño axonal en pacientes diagnosticados con esclerosis múltiple, se llevó a cabo una colaboración con los investigadores Caterina Mainero y Nicola Toschi del Centro Athinoula A. Martinos de Imágenes Biomédicas del Hospital General de Massachusetts. En este centro puntero en neuroimagen, afiliado a la Escuela de Medicina de Harvard y al Instituto Tecnológico de Massachusets (MIT), los investigadores pudieron utilizar el imán MRI Siemens Connectom, uno de los más potentes y avanzados que existen en la actualidad a nivel mundial, lo que les permitió alcanzar la sensibilidad necesaria para llevar a cabo la investigación.

“El resultado más destacable que encontramos fue que el aumento del tamaño de los axones estaba directamente relacionado con etapas tempranas de la enfermedad de esclerosis múltiple”

En este procedimiento, los expertos encontraron que existía un daño axonal difuso en la mayoría de la materia blanca del cerebro, que se compone principalmente de axones y mielina. “El resultado más destacable que encontramos fue que el aumento del tamaño de los axones estaba directamente relacionado con etapas tempranas de la enfermedad de esclerosis múltiple, lo que confirma nuestra hipótesis de que este aumento de tamaño puede ser un biomarcador temprano de la enfermedad”, destaca Cerdán.

Gracias a este estudio, los investigadores han logrado crear un marco experimental para poner a prueba la capacidad y han reconciliado las diferencias encontradas en estudios previos. “A través de técnicas de microscopia electrónica, que hemos llevado a cabo en colaboración con el investigador Jose Antonio Gómez-Sánchez, que dirige la Plataforma de Microscopía Electrónica del Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (ISABIAL), hemos podido detectar que el sesgo en el tamaño axonal que se había producido en anteriores trabajos se debe, al menos en parte, al proceso de preparación de la muestra. Por lo que hemos confirmado nuestra hipótesis de que las medidas de tamaño axonal proporcionadas por técnicas de MRI son fiables”, aclara la investigadora.

Los resultados de este estudio abren el camino a la búsqueda de nuevos tratamientos enfocados en revertir el daño axonal. “Existen trabajos en modelos animales de esclerosis múltiple que sugieren que el daño axonal temprano podría ser reversible, lo que refuerza la importancia de este hallazgo y plantea futuras vías de investigación” señala la investigadora. “Este enfoque no solo busca mejorar el diagnóstico, sino proporcionar una herramienta novedosa que permita en el futuro poder desarrollar nuevos tratamientos para abordar la enfermedad desde su raíz y mejorar la calidad de vida de quienes la sufren”, añade.