Las personas con un riesgo genético bajo de TDAH son más ‘afortunadas’ – Neuropsicología Bogotá

Un estudio reciente muestra que las personas con bajo riesgo genético para el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) no solo tienen menos probabilidades de tener el trastorno, sino que también tienen resultados económicos, de salud y de comportamiento mejores de lo esperado en la edad adulta.

Los resultados, publicados en la revista Psychological Medicine, “capturan mucho más que el riesgo o no riesgo de desarrollar un trastorno psiquiátrico”, asegura el autor del estudio James Li, profesor de Psicología de la Universidad de Wisconsin-Madison e investigador del Centro Waisman de la Universidad de Washington. Sugieren que las personas con bajo riesgo genético para el TDAH pueden estar protegidas de muchos otros eventos vitales negativos que se observan en personas con mayor riesgo genético.

Por ejemplo, los adultos con menor riesgo genético para el TDAH también informaron, en promedio, un cociente intelectual más alto y mayores logros educativos, antecedentes penales más cortos o nulos, un índice de masa corporal (IMC) más bajo y tasas inferiores de depresión que los adultos con genética media a alta riesgo de TDAH.

Duda de un estudiante

La mayoría de los trastornos psiquiátricos son causados ​​por muchos genes, cada uno de los cuales tiene una pequeña influencia en el trastorno. Los investigadores pueden estimar el “riesgo genético” de una persona para un trastorno psiquiátrico utilizando su ADN para crear el puntaje poligénico (PGS, por sus siglas en inglés), que suma todos los pequeños factores de riesgo genético que conllevan. Según los expertos, cuanto mayor es el número, mayor es el riesgo genético de una persona.


Los adultos con menor riesgo genético también informaron de un cociente intelectual más alto

Li se preguntó si lo contrario también era cierto: ¿un puntaje PGS bajo siempre se traduce en un menor riesgo de trastorno? “La mayoría de los investigadores han centrado su atención en las personas con un PGS más alto”, explica Li. Él se interesó en las personas con puntuaciones de riesgo poligénico más bajo después de que un estudiante universitario le preguntase por ello.

“No tenía respuesta para eso”, confiesa Li. “Ese día, comencé a ejecutar los análisis. Y luego me di cuenta de que tenía un papel en mis manos que nadie más había visto”.

Observación de los genes del trastorno

Los datos para el artículo de Li provienen de un estudio de asociación de genoma (GWAS, por sus siglas en inglés) disponible públicamente para el TDAH. Esto le permitió observar específicamente los genes del trastorno en un individuo determinado y examinar cómo se relacionan con otros resultados que generalmente están asociados con él, como el nivel de educación, la depresión, los antecedentes penales y el IMC.

“‘GWAS’ identifica todas las variantes genéticas que están estadísticamente asociadas con el TDAH, pero con un gran poder estadístico”, explica Li.

El TDAH es un buen trastorno para usar como prueba de fuego para ver un PGS bajo y sus implicaciones en otros resultados en la vida, agrega. Es un trastorno heredable, bastante frecuente y que exhibe resultados negativos predecibles en la vida adulta.

Li espera que su artículo aliente a otros investigadores a investigar más a fondo las implicaciones clínicas del bajo PGS, especialmente en el contexto de otros trastornos psiquiátricos. También planea realizar un estudio de seguimiento para examinar si las personas con bajo PGS también pueden ser más resistentes a los estresores en sus vidas.

Tomado de: https://www.redaccionmedica.com/secciones/psiquiatria/las-personas-con-un-riesgo-genetico-bajo-de-tdah-son-mas-afortunadas–2868&utm_source=publicacionmedica&utm_medium=email&utm_campaign=boletin Neuropsicologia Bogota

Entrenamiento cognitivo combatiría la depresión en caso de lesión cerebral – Neuropsicología Bogotá

Por: Rita Arosemena P.

Cortesía de VSRao

Hace un par de años publicamos un artículo en relación con la eficacia del entrenamiento cognitivo en pacientes con cáncer. Desde entonces, se han realizado estudios en torno a los beneficios de este tipo de entrenamiento en personas con enfermedades cardíacas y desórdenes neurológicos.

Ahora, investigadores de la Universidad de Texas en Dallas sugieren que el entrenamiento cognitivo podría ser útil, también, para reducir los síntomas de la depresión en pacientes con lesión cerebral, una población que suele enfrentar más de una condición clínica.

El estudio se basó en evaluar los efectos del entrenamiento cognitivo en un grupo de 79 pacientes lesión cerebral traumática en un lapso de 8 semanas. El programa abordó estrategias para mejorar la atención selectiva, el razonamiento abstracto y otras dimensiones del pensamiento consciente.

Los resultados indican que los pacientes con depresión y lesión cerebral traumática que recibieron entrenamiento cognitivo vieron una reducción significativa en los síntomas, lo que a su vez mejoró el rendimiento en la vida diaria.

De acuerdo con Kihwan Han, del Centro de Salud Mental de la Universidad de Texas en Dallas, «las personas con lesión cerebral traumática (TBI) son una población compleja porque a menudo tienen otras afecciones clínicas, como la depresión. Sin embargo, se sabe poco sobre lo que le sucede al cerebro cuando las personas con TBI reciben tratamiento para la depresión, así que esta investigación se centró en cómo el cerebro responde al entrenamiento cognitivo». 

El estudio, si bien prometedor, cuenta con algunas limitaciones que pueden ser pasadas por alto. Los investigadores señalan que la severidad en los síntomas de depresión exhibidos por los participantes no llegaron a alcanzar un nivel clínico, de modo que para confirmar la utilidad del entrenamiento cognitivo y descubrir los efectos a escala cerebral en el tratamiento para la depresión, deberán replicar el estudio en un grupo independiente de sujetos con lesión cerebral traumática y depresión severa.Artículo relacionado:Depresión y ansiedad: 6 errores que debes evitar en la recuperación

Los hallazgos fueron publicados en la revista Human Brain Mapping.

Referencia del estudio: Han, K., Martinez, D., Chapman, S., & Krawczyk, D. (2018). Neural correlates of reduced depressive symptoms following cognitive training for chronic traumatic brain injury. Human Brain Mapping39(7), 2955-2971. doi:10.1002/hbm.24052

Tomado de: https://www.psyciencia.com/entrenamiento-cognitivo-depresion-lesion-cerebral/?fbclid=IwAR2g5-AsiQr29xL6PdJUX-c1r5i6nfpFhXBD_nplTngqm7jTAenx_I_u50A Neuropsicologia Bogota

Cómo entender tu reloj biológico puede mejorar tu calidad de vida – Neuropsicología Bogotá

¿Sabías que los ritmos circadianos están presentes en todo el mundo viviente, desde los hongos hasta los humanos?

Todos los seres vivos, incluidas las bacterias diminutas, tienen un ciclo circadiano: un proceso biológico que dura cerca de 24 horas y marca el ritmo de nuestra existencia.

Pero, ¿sabes cuánto te afecta esto?

1. Los ritmos circadianos han existido desde hace mucho tiempo

Se cree que las primeras células de la Tierra eran dañadas por los rayos ultravioleta y se adaptaron para repararse a sí mismas durante la noche.

Hojas de mimosa con flores.
Image captionLas hojas de mimosa no necesitan de la luz solar para abrir y cerrar sus hojas.

2. No eres el único que los tiene

Los científicos creen que cualquier forma de vida que obtiene energía de la luz solar tiene algún tipo de ritmo circadiano para sacar el mayor provecho de la luz y la oscuridad.

Numerosos experimentos han demostrado que las hojas de la mimosa pudica, por ejemplo, se abren y se cierran en la oscuridad, siguiendo sus propios ritmos circadianos, en lugar del dictado por el Sol.

Un grupo de hongos blancos en un tronco.
Image captionTodos los seres vivos tienen un ciclo circadiano.

3. Le proporcionan límites a la vida

Los ritmos circadianos permiten a los organismos anticipar eventos como la noche y el día, el invierno y el verano, y prepararse así para esos eventos.

Imagen ilustrada del cerebro humano, mostrando la ubicación del hipotálamo.
Image captionOlvídate de la hora del meridiano de Greenwich, el reloj que realmente importa para tu cuerpo está en tu hipotálamo.

4. Tienes un reloj maestro

Se encuentra en el hipotálamo de tu cerebro y, como un director de orquesta, envía señales de regulación a través de tu cuerpo en diferentes momentos del día.

Niña dando botes en un patio con hojas secas.
Image captionEl cuerpo humano hace todo lo posible para mantenerse sincronizado consigo mismo en todo momento…

5. También tienes relojes periféricos

Todos tus órganos y tejidos corporales tienen relojes adicionales que están sincronizados con el reloj maestro en tu cerebro.

Ilustración de las células con su núcleo.
Image captionCada célula del cuerpo tiene un sentido particular del tiempo.

6. Y tienes relojes en cada célula

Cada célula de tu cuerpo tiene la capacidad de generar una oscilación de 24 horas.

Un oso en la entrada de una cueva.
Image captionLos animales que hibernan producen más melatonina.

7. Ritmos circanuales

A medida que las noches crecen y el sueño se alarga, los cerebros liberan más melatonina, la hormona que regula el sueño y la vigilia.

Muchos animales, como los ciervos, responden a esto preparándose para aparearse o hibernar.

Se piensa que los humanos producen más anticuerpos en invierno para combatir las enfermedades.

Una persona dibujando un corazón al unir sus manos.
Image captionDebes obtener suficiente luz diurna todos los días para mantenerte saludable.

8. La luz del día te mantiene regular

Si te abandonaran en la oscuridad, el reloj de tu cuerpo quedaría fuera de sintonía con el reloj usual de 24 horas.

Hay sensores en tus ojos que detectan luz y envían señales a la parte de tu cerebro que mantiene sincronizados los relojes de tu cuerpo.

Una ilustración que muestra una camisa con un reloj y un sombrero.
Image caption¿Cómo sabes que es hora de dormir?

9. ¿Hora de acostarse?

Desde el momento en que te levantas por la mañana, la presión del sueño se acumula.

Sin embargo, en términos generales, no te quedas dormido hasta que tu reloj biológico te dice que es el momento adecuado para hacerlo.

Un joven durmiendo en el teclado de su laptop.
Image caption¿Sabes cuántos días necesitas para sincronizar tu cuerpo al pasar de zona horaria?

10. Jet lag

Te sientes con jet lag cuando el reloj maestro de tu cuerpo está en un momento dado y otras partes de tu cuerpo, como el hígado, el intestino, el cerebro y los músculos, están en momentos diferentes.

Para que todos se sincronicen, es necesario un día por cada zona horaria que hayas cruzado. 

Una enfermera sentada en un sofá tocándose los ojos por el
Image captionTu reloj biológico dice que debes dormir, pero tu alarma suele decir que no.

11. Jet lag social

Los trabajadores que trabajan por turnos y otros que tienen un desajuste entre su tiempo biológico y social pueden experimentar algo que es conocido como “jet lagsocial”.

Esto significa que existe una diferencia entre la hora en que su cuerpo quiere despertarse y la hora en que suena el despertador.

Los estudios sugieren que existe una correlación entre esto y un mayor riesgo de sufrir depresión, obesidad, enfermedad cardíaca, diabetes y cáncer.

Una adolescente dormida en un salón de clases.
Image captionLa falta de sueño y los adolescentes con mal genio van de la mano.

12. Permite que los adolescentes cansados duerman hasta tarde

Es probable que las hormonas que surgen durante la pubertad retrasen el reloj hasta dos horas.

Pedirle a un adolescente que se levante a las siete de la mañana es como pedirle a alguien de 50 años que se levante a las cinco.

Más adelante en la vida, volvemos a los tiempos de vigilia y sueño que teníamos antes de la pubertad.

Tomado de: https://www.bbc.com/mundo/noticias-45959585?fbclid=IwAR0bHoS8cie4v-iaol7GLcOsuGxTC3N-cE-MJCcYPB5WwHL7IA_sxv9Vhzw Neuropsicologia Bogota