Daño cerebral adquirido: desde el punto de vista de la neuropsicología

POR: SERGIO DE DIOS GONZALEZ

El concepto daño cerebral adquirido (DCA) se refiere a una lesión del cerebro, el cual hasta ese momento había tenido un desarrollo normal. Las causas pueden ser muy distintas, desde un traumatismo craneoencefálico como consecuencia de un accidente de tráfico hasta un tumor cerebral, pasando por muchas otras (anoxia, accidente cerebrovascular, etc.).

La principal consecuencia del daño cerebral adquirido es la pérdida de funciones cerebrales previamente desarrolladas. Estas funciones implican al sistema motor y sensorial, al funcionamiento cognitivo, a las habilidades comunicativas y la capacidad para regular la conducta y las emociones. Así, una característica frecuente de los pacientes afectados por DCA es la pérdida de independencia funcional, derivando en una situación de discapacidad, con la consiguiente sobrecarga de su entorno más próximo.

¿Qué papel tiene la neuropsicología ante el daño cerebral adquirido?

La rehabilitación neuropsicológica emplea tres herramientas o estrategias básicas en los pacientes afectados por DCA:

  • Restitución o restauración: a través de la estimulación o el ejercicio de la función afectada, bien por pérdida total o por déficit.
  • Compensación: mediante el apoyo o el empleo de otras funciones cognitivas preservadas para la ejecución de la tarea que principalmente se realizaba con la función alterada.
  • Sustitución: se refiere al empleo de ayudas o mecanismos externos para el desarrollo eficaz de la tarea.

Estas tres estrategias clásicas se utilizan con el objetivo principal de conseguir que el sujeto retome sus actividades cotidianas de la forma más productiva y satisfactoria posible.

¿Cuáles son las funciones cognitivas que se pueden ver afectadas tras un daño cerebral adquirido?

Las funciones cerebrales superiores, como el razonamiento, la memoria o la atención son fundamentales para tener una vida plena e independiente. A lo largo del día utilizamos las funciones cognitivas continuamente. Nuestro cerebro usa las distintas capacidades cognitivas para preparar la comida, conducir o tener reuniones, activándose en mayor o menor medida distintas partes de los hemisferios. Las funciones cognitivas básicas son las siguientes:

  • Orientación: capacidad que nos permite ser conscientes de nosotros mismos y del contexto en el que nos encontramos en un momento determinado. Por tanto, la orientación se valora mediante tres parámetros: personal, espacial y temporal.
  • Atención: estado de observación y de alerta que nos permite tomar conciencia de lo que ocurre en nuestro entorno. Dentro de esta función debemos hablar de cinco procesos diferentes: atención selectiva, atención sostenida, atención alternante, velocidad de procesamiento y heminegligencia.
  • Funciones ejecutivas: son actividades mentales complejas y necesarias para planificar, organizar, guiar, revisar y evaluar el comportamiento necesario para adaptarse eficazmente al entorno y para alcanzar metas. Dentro de las funciones ejecutivas encontramos: memoria de trabajo, planificación, flexibilidad, etc.
  • Lenguaje: dentro del lenguaje hay diferentes procesos que pueden verse afectados ante un daño cerebral adquirido como el vocabulario, la expresión, la comprensión, etc.
  • Memoria: capacidad de codificar, almacenar y recuperar de manera efectiva información aprendida o un suceso vivido. Podemos distinguir entre memoria episódica, memoria semántica o memoria procedimental.

La modificación de conducta y la psicoterapia también son importantes en el daño cerebral adquirido

En el proceso de rehabilitación neuropsicológica existen técnicas propias de la psicología clínica que se emplean de un modo extendido. En concreto, pueden considerarse tres grandes grupos de procedimientos:

  • Terapia de conducta o modificación conductual: aquí se incluyen el condicionamiento clásico, el condicionamiento operante y el aprendizaje vicario. Todos ellos tienen en común el análisis y manipulación entre los estímulos y las respuestas. El objetivo es aumentar las conductas deseables y eliminar las no deseadas. Se aplican fundamentalmente para la intervención en alteraciones del comportamiento: agresividad, irritabilidad, desinhibición y otras conductas no deseables.
  • Terapia cognitivo-conductual: la idea fundamental es que la conducta y las emociones vienen determinadas por cómo el individuo percibe e interpreta las diferentes experiencias. Por tanto, la reestructuración cognitiva trata de modificar esas cogniciones, de modo que resulte en un cambio de comportamiento y de emociones del sujeto.
  • Psicoterapia: se incluyen intervenciones interpersonales enfocadas a los aspectos psicológicos reactivos a la lesión cerebral, a alteraciones emocionales y de la personalidad o a alteraciones en la autoconciencia.

Cada uno de los tres procedimientos anteriores ha demostrado ser eficaces en diferentes pacientes afectados por un daño cerebral adquirido a lo largo del tiempo. Del mismo modo, en los últimos años también se han intentado implantar las nuevas tecnologías en este campo, demostrando su utilidad y su gran riqueza de aplicación.

Por todo lo anteriormente expuesto, se considera la rehabilitación neuropsicológica como una herramienta útil para la mejora de las funciones cognitivas básicas en los pacientes afectados por daño cerebral adquirido.

La neuropsicología del envejecimiento

POR: PAULA VILLASANTE

El envejecimiento es un tema que ha despertado interés en los últimos años. Esto se debe al aumento de esperanza de vida al nacer, así como a la proporción de personas mayores de 60 años con respecto a la población general.

Todos envejecemos. Nos guste o no, sabemos que nuestras células envejecen con el tiempo y que tanto nuestro aspecto físico como nuestra cognición irán cambiando con los años. Uno de los campos que se ocupan de estudiar estos cambios a nivel neuronal es la neuropsicología del envejecimiento.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde un punto de vista biológico, el envejecimiento es la consecuencia de la acumulación de una gran variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo, lo que lleva a un descenso gradual de las capacidad físicas y mentales. Además, el envejecimiento también lleva a un aumento del riesgo de enfermedad, y finalmente a la muerte.

Sin embargo, además de los cambios biológicos, también hay otros factores que influyen en el envejecimiento. Así, influyen también los entornos físicos y sociales, particularmente la vivienda, el vecindario y las comunidades que rodean a la persona. Además, las características personales de cada uno (sexo, etnia, nivel socioeconómico…) también tienen que ver en cómo envejecemos.

Envejecimiento normal y patológico

La neuropsicología del envejecimiento normal

Los cambios fisiológicos que ocurren en el envejecimiento normal pueden conllevar pérdidas funcionales, y dependen de varios factores:

  • Estatus cognitivo.
  • Discapacidad física.
  • Factores emocionales.
  • Enfermedades médicas intercurrentes.
  • Calidad de vida…

Patologías como la hipertensión, la diabetes, o patologías cardiovasculares, suponen con el tiempo una pérdida de las capacidades físicas y funcionales. Así, por ejemplo, la ansiedad y la depresión incrementan el riesgo de desarrollar deterioro cognitivo. En el envejecimiento normal, el grado de pérdida de función está influido por la reserva cerebral y cognitiva.

La reserva cognitiva es la capacidad del cerebro adulto de mantener una función normal cuando se ve afectado por agresiones. Así, el impacto de las agresiones es menor cuanto mayor es la reserva coginitiva. Esto ocurre porque el tejido cerebral sano es capaz de suplir la pérdida de neuronas y sinapsis. Así, en individuos con menor reserva cognitiva, la misma patología produciría un mayor déficit.

En este sentido, el modelo neuropsicológico del envejecimiento se centra en las relaciones existentes entre la cognición y los factores de riesgo, los factores protectores, el cerebro y el estado clínico de los pacientes. Así pues, para el estudio de los cambios cognitivos asociados a la edad, son analizados algunos aspectos de la cognición como:

  • Velocidad de procesamiento.
  • Atención.
  • Memoria y aprendizaje.
  • Lenguaje.
  • Funciones ejecutivas.
  • Funciones premotoras, visoperceptivas y visoespaciales.

Pruebas asociadas al envejecimiento normal

Sobre el estado cognitivo general, la actividad funcional y el estado de ánimo:

  • Mini-mental state examination (MMSE).
  • Blessed Dementia Scale (BDS).
  • Functional Activity Questionnaire (FAQ).
  • Back Depression Inventory (BDI).
  • Subtest de Información (WAIS-III).

Sobre la velocidad de procesamiento y la atención:

  • Tarea de tiempos de reacción (PC, Vienna System)
  • Paced Auditory Serial Addition Test (PASAT)
  • Trail Making Test (TMT-A)
  • Color Trails Test (CTT)

Por último, sobre las funciones visoespacialesvisoperceptivas y visoconstructivas:

  • Resonancia magnética estructural.
  • Resonancia magnética funcional.

Cambios cognitivos en la neuropsicología del envejecimiento normal

En el envejecimiento, es importante la variabilidad individual de cada uno que nos lleva a presentar unos u otros cambios en nuestro cuerpo. Sin embargo, existen varios factores que contribuyen a esa variabilidad:

  • Estado de salud general: física, mental y emocional
  • Nivel cultural
  • Nivel de actividad física y cognitiva
  • Factores hereditarios
  • Factores económicos, sociales y familiares

Las funciones cognitivas en la neuropsicología del envejecimiento normal

Cuando envejecemos, hay algunas funciones cognitivas que se ven más afectadas que otras. Así pues, el envejecimiento afecta más a las habilidades fluidas que a las habilidades cristalizadas. Las primeras son algunas como el razonamiento, la memoria de trabajo, la velocidad de procesamiento… etc. Las segundas hacen referencia a los conocimientos acumulados y la experiencia.

Así, sabemos gracias a la investigación que el deterioro de algunas funcionescomienza en la juventud, mientras que otras permanecen a un mismo nivel hasta edades avanzadas. De esta manera, algunas funciones como el vocabulario, la información general o el recuerdo de episodios históricos o personales pasados se mantienen relativamente estables.

Otras funciones, como la habilidad aritmética, disminuye a partir de los 25 años. La velocidad de procesamiento de la información, la memoria episódica y la fluencia verbal disminuyen a partir de los 70 años.

Neuropsicología del envejecimiento patológico

En muchas de las patologías asociadas al envejecimiento encontramos el deterioro cognitivo leve (DCL). Se trata de un “estado” de afectación cognitiva superior al del grupo etario pertinente, no llegando a cumplir los criterios establecidos para la demencia. Así, según Petersen (2001), para el diagnóstico de DCL han de observarse los siguientes síntomas durante al menos seis meses:

  • Quejas subjetivas de memoria, preferiblemente reveladas por informadores fiables.
  • Quejas subjetivas de una o varias áreas cognitivas, preferiblemente reveladas por informadores fiables.
  • Deterioro cognitivo en memoria o algún otro dominio cognitivo.
  • Actividades de la vida diaria preservadas.
  • Ausencia de demencia.

Así, parece claro que, con la edad, las funciones cognitivas disminuyen. La población de persona mayores cada vez es mayor y es por ello que han de ponerse en marcha mecanismos que mejoren su calidad de vida. El mundo ha de estar preparado para atender de forma efectiva e integral a los problemas que puedan surgir relacionados con el envejecimiento progresivo de la población.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/la-neuropsicologia-del-envejecimiento/

La neuropsicología del desarrollo infantil

POR: PAULA VILLASANTE

La neuropsicología del desarrollo infantil es una disciplina que hace de puente entre la psicología y la neurología. Lo cierto es que en los últimos años ha crecido mucho, ya que cada vez somos más conscientes de todo lo que podemos cuidar de las futuras generaciones investigando en ella. Así, en este artículo te la presentamos.

En las últimas décadas, ha crecido el interés por los problemas de aprendizaje y desarrollo en niños. Así nace la neuropsicología del desarrollo infantil. Esta disciplina aborda la relación existente entre el proceso madurativo del sistema nervioso central y la conducta durante la infancia (1). Así, esta disciplina de la neuropsicología sitúa en un lugar central a la valoración del neurodesarrollo en la prevención y detección temprana de posibles trastornos (2).

Chávez (2003) plantea que para determinar si un niño presenta problemas en su neurodesarrollo es importante, en primer lugar, conocer la organización y desarrollo normal del sistema nervioso central. Esto es porque el conocimiento sobre el sistema nervioso y su desarrollo es la base para la prevención y detección de diferentes trastornos.

Del mismo modo, Rains (2003) se refiere a las alteraciones en el sistema nervioso y en la maduración cerebral por causas pre, peri y posnatales. Estas alteraciones, en casi la totalidad de los casos, producen como consecuencia trastornos neuropsicológicos en la infancia. Si estos no son detectados a tiempo, pueden aumentar sus secuelas: es por ello que los autores recalcan la importancia de la neuropsicología del desarrollo infantil.

Otros autores, como Weber y Reynolds (2004), recalcan la influencia de los factores ambientales el desarrollo cerebral. Así, realizan estudios en los que analizan la asociación entre la plasticidad cerebral y eventos traumáticos durante la infancia. Los autores explican que, en Estados Unidos, de los niños y niñas reportados anualmente por maltrato (evento traumático), entre un 27% y un 100% desarrollan secuelas físicas, conductuales, sociales, cognitivas o problemas emocionales.

Así, parece que el estudio de la neuropsicología del desarrollo infantil se centra en los factores de riesgo y los posibles trastornos psicopatológicos y neuropsicológicos que estos puedan provocar en niños y niñas (1).

Origen de las lesiones cerebrales infantiles

Según las autoras Cuervo y Ávila, la etiología de las lesiones cerebralesinfantiles puede clasificarse según diversos indicadores en función del momento en el que se den:

  • Prenatales (toxoplasmosis, desnutrición intrauterina, maltrato intrauterino entre otros).
  • Perinatales (hipoxia, meconio…).
  • Posnatales (traumatismos cráneo-encefálicos, infecciones, desnutrición…).

De ahí la importancia de que en la evaluación se realice una historia clínica completa. Esta debe incluir toda la información referida a las características y condiciones del desarrollo durante los primeros años de vida. Algunos autores (5, 6, 7) clasifican las principales causas de lesión cerebral según el tipo de daño en:

  • Traumáticas.
  • Vasculares (hemorragias).
  • Infecciosas (meningitis, toxoplasmosis).
  • Metabólicas (galactosemia).
  • Neurotóxicas.

Estos autores recalcan la importancia de la plasticidad cerebral y de la madurez neuropsicológica en la infancia para evaluar las secuelas y la recuperación después de una lesión.

Valoración de la neuropsicología del desarrollo infantil

Algunos autores (7) afirman que la valoración de la neuropsicología del desarrollo infantil no es igual a la valoración del adulto. Esto es porque la neuropsicología del desarrollo tiene como principal objeto de estudio el desarrollo de las funciones cognitivas y su relación con la maduración cerebral a lo largo del ciclo vital. Mientras, la neuropsicología del desarrollo infantil se centra en:

  • Primero, las diferencias existentes en la maduración cerebral desde el nacimiento a la adolescencia entre niños y niñas,
  • Las diferencias entre el cerebro adulto y el cerebro en desarrollo, así como…
  • El patrón inverso que se observa en el desarrollo de la sustancia blanca frente al de la sustancia gris.

Madurez neuropsicológica

La madurez neuropsicológica se define como el nivel de organización y desarrollo madurativo que permite un desenvolvimiento en las funciones cognitivas y comportamentales, de acuerdo a la edad cronológica de la persona. Se resaltan los cambios durante el desarrollo, especialmente en la infancia.

De esta manera, la evaluación e intervención de la neuropsicología del desarrollo infantil debe partir de objetivos específicos acordes con la edadde la niña o el niño (1).

Evaluación del neurodesarrollo infantil

En la infancia, la etiología de los trastornos neuropsicológicos se puede ubicar en dos grupos (1):

  • Primero, los sujetos con afectación específica del desarrollo madurativo.
  • Segundo, los sujetos que después de un desarrollo inicial normal sufren un accidente patológico que deja secuelas que alteran de forma focal o difusa dicho desarrollo.

Áreas que deben ser evaluadas en neuropsicología infantil (10)

  • Motricidad
    • Destreza manual.
    • Orientación derecha-izquierda.
    • Praxias orofaciales.
    • Control verbal de la motricidad.
  • Percepción
    • Visual.
    • Auditiva.
    • Táctil.
  • Lenguaje
    • Capacidaes receptivas y expresivas del lenguaje oral.
    • Aspectos psicoeducativos.
  • Memoria
    • Verbal y no verbal.
    • A corto y largo plazo.

Algunas pruebas neuropsicológicas del desarrollo infantil

  • Cuestionario de Madurez neuropsicológica infantil (CUMANN).
  • Prueba ENI (Evaluación Neuropsicológica Infantil).

Así, queda claro que la intervención neuropsicológica del desarrollo infantil ha de ser global. En sociedades como la actual son urgentes la detección, rehabilitación y estimulación de funciones que favorezcan la madurez neuropsicológica. Por ello es importante el desarrollo de disciplinas como la neuropsicología del desarrollo infantil, con el objetivo de prevenir la salud de los niños.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/la-neuropsicologia-del-desarrollo-infantil/

¿Cuál es la diferencia entre psicología clínica y neuropsicología?

POR: MARIA PAULA ROJAS

A pesar de que la psicología clínica y la neuropsicología son enfoques que comparte muchos ámbitos, es necesario conocer qué diferencias hay entre ellas. De hecho, esta es precisamente la clave para identificar cómo y por qué se complementan.

La psicología es una ciencia que surge con la necesidad de conocer y entender al ser humano. Con el paso del tiempo, se han desarrollado varias especialidades, las cuales van creciendo en función al área de estudio en la que se enfocan. Es en este contexto en el que hablamos de la diferencia entre psicología clínica y neuropsicología.

Con el surgimiento de los diferentes enfoques, también se ha aumentado la especialización y el número de interrogantes que afrontamos. Por lo tanto, en este artículo se intentará mostrar la diferencia entre la psicología clínica y neuropsicología.

Psicología clínica

Son muchos los que consideran que la psicología clínica surgió en 1896, de la mano de Lightner Witmer, al fundar la primera clínica de psicología. Esta nueva rama se consolidó con la fundación de la asociación psicológica estadounidense, conocida en la actualidad como APA.

En un inicio, el objetivo de la psicología clínica era buscar rasgos o factores internos que llevan a las personas a desarrollar una condición psicopatológica. Estudiando no solo su propia condición, sino también los factores que controlan e intervienen en este tipo de comportamientos. Siguiendo esta línea, este enfoque de la psicología surgió como un estudio de lo “anormal” y, por ende, su campo de acción se desarrolló en función de explicar y tratar lo que está afectado.

Con el paso del tiempo, comenzó a tomar protagonismo no solo la recuperación, sino también en la prevención del desarrollo de enfermedades mentales. Por ende, inició el trabajo en técnicas para evitar el desarrollo de patologías mediante la enseñanza de hábitos mentales saludables.

Asimismo, se comenzó a implementar lo que se conoce como “terapia de consejo”. En esta, se enseña a las personas a resolver eficazmente sus problemas dando protagonismo a situaciones que se pueden presentar en su vida cotidiana. Como resultado, se comienza a dar un apoyo emocional.

Neuropsicología

La neuropsicología surge formalmente a principio del siglo XX de la mano de A.R. Luria. En sus investigaciones desarrolló técnicas para estudiar el comportamiento de personas con algún tipo de lesión en el sistema nervioso central. Estos estudios permitieron a los neurólogos contar con suficientes datos como para localizar el lugar y extensión de la lesión, encontrando el mejor procedimiento para intervenir.

Con este principio, su trabajo se enfoca en personas que presentan algún daño cerebral, derivando en una alteración en las funciones cognitivas. Por lo tanto, este enfoque tiene como objetivo la evaluación y rehabilitación de funciones cognitivas y comportamentales. En la actualidad, no solo se trabaja con personas que hayan adquirido un daño, también se trabaja con niños que presenten dificultades en su desarrollo neuronal.

¿Cuál es la diferencia entre psicología clínica y neuropsicología en el ámbito clínico?

En esencia, la psicología clínica trabaja para el diagnóstico y tratamiento de trastornos emocionales, de personalidad y problemas en el comportamiento. Por lo tanto, se encarga de trabajar problemas como la depresión, la ansiedad, entre otros. Asimismo, puede dar herramientas de manejo a trastornos comportamentales, como la hiperactividad.

En el ámbito de la prevención, la psicología clínica se encarga de enseñar:

  • Estrategias de afrontamiento ante situaciones complejas.
  • Habilidades sociales.
  • Entendimiento y control de emociones..

Todo esto, se hace con el fin de que la persona aprenda a conocerse a sí mismo y se pueda desarrollar adecuadamente ámbitos sociales y cognitivos. Como resultado, va poder desarrollar una mejor calidad de vida.

La diferencia de la psicología clínica y la neuropsicología es la función que tienen en el ámbito clínico. Esta última se encarga de la evaluación del funcionamiento cognitivo y emocional relacionadas con alteraciones cerebrales. Asimismo, desarrolla procesos de rehabilitación de las funciones superiores para que la persona pueda desarrollar una autonomía y pueda mantener su calidad de vida.

Por lo tanto, el neuropsicólogo suele enfocarse en personas con problemas en: memoria, atención, praxias, gnosias, lenguaje y funciones ejecutivas. Asimismo, se trabajan aspectos cognitivos relaciones con enfermedades mentales, como la esquizofrenia o trastorno obsesivo compulsivo.

Dentro de los objetivos de la rehabilitación, está tanto la recuperación de lo dañado, como la estimulación de las funciones para que se desarrollen adecuadamente. De igual manera, debe encontrar estrategias para compensar las funciones que no se pueden recuperar.

En la investigación, ¿cuál es la diferencia entre psicología clínica y la neuropsicología?

En la actualidad, una de las líneas de investigación de la psicología clínica se centra en la profundización y entendimiento de los trastornos psicopatológicos. Lo hace para encontrar las diferencias entre las personas que tienen conductas acordes a lo que pide la sociedad y las que no la tienen.

Asimismo, intenta entender y teorizar de una manera más profunda el desarrollo personal de los individuos. Por lo tanto, su exploración se dirige a factores que pueden predisponer a la persona a desarrollar un trastorno emocional.

Otro de los enfoques de la investigación es la psicoterapia. En este caso, quieren encontrar herramientas para mejorar su manera de diagnosticar y tratar los trastornos emocionales. Como consecuencia, quieren desarrollar herramientas que sean más precisas y adaptadas a cada uno de los trastornos.

En contraposición, la neuropsicología enfoca su investigación en aspectos diferentes. Por un lado, se están comenzando a trabajar mano a mano con la neurociencia cognitiva. Esto con el fin, de entender el papel de las funciones cognitivas superiores en el desarrollo de patología psiquiátricas y psicológicas. Asimismo, se pretende ayudar a desarrollar estrategias para una recuperación más efectiva de estos trastornos.

Además, las exploraciones se han centrado en entender las consecuencias que tienen las personas por presentar dificultades en el neurodesarrollo. Así, el estudio se ha centrado en patologías que han mostrado estar asociadas a dificultades en desarrollo cerebral, como son el autismo y el TDAH.

Por último, la rehabilitación neuropsicológica también está en su foco de interés. Aquí, se quieren integrar cada vez más las herramientas tecnológicas para una mejor adaptación de las terapias a la realidad. Con esto, se pretende mejorar los resultados, ya que se pueden llegar a desarrollar actividades mucho más cercanas a la cotidianidad del paciente.

Conclusión

Es importante aclarar que estas dos especialidades, a pesar de ser diferentes,son complementarias tanto en la práctica clínica como en la investigación.Un adecuado diagnóstico y tratamiento de cualquier tipo de enfermedad psicológica o neuropsicológica debe incluir la perspectiva de las dos especialidades. Es decir, ayudan a complementarse para lograr el objetivo de dar autonomía y calidad de vida a la persona.

Aun así, existen diferencias entre la psicología clínica y la neuropsicología. Entender que cada una de ellas se especializa en ámbitos clínicos diferentes. Es decir, que una se encarga de los trastornos emocionales y de comportamiento y la otra se enfoca en déficits cognitivos y daños cerebrales.

Por último, la investigación toma caminos diferentes, enfocándose en aspectos relevantes para cada una de ellas. Aun así, los avances en los dos aspectos ayudarán a encontrar mejores herramientas o explicaciones a múltiples aspectos relacionados con la salud mental

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/cual-es-la-diferencia-entre-psicologia-clinica-y-neuropsicologia/

Neuropsicología forense: definición, objetivos y campos de aplicación

POR: MARIA PAULA ROJAS

Te has preguntado alguna vez qué hace un neuropsicólogo en un juicio. En este artículo abriremos las puertas de la neuropsicología forense, una disciplina que se encarga de peritar cuestiones psicológicas en distintos litigios.

¿Te has preguntado qué puede hacer un neuropsicólogo dentro de un juicio? Como sabemos la neuropsicología tiene en cuenta la relación entre el cerebro y el funcionamiento cognitivo, conductual y emocional. Todo eso ayuda a entender mejor muchos trastornos o dificultades de la vida diaria. Aun así, dentro de la disciplina existen divisiones que se relacionan con el tipo de aplicación de los conocimientos. Una de ellas es la neuropsicología forense.

Esta disciplina ha tomado protagonismo a partir de los años 80 gracias a la utilidad que puede tener en algunos casos jurídicos. Por lo tanto, es interesante entender en qué consiste esta disciplina y cuáles son sus posibles aplicaciones. Hacerlo, por ejemplo, nos dirá cuándo es necesario acudir a un especialista.

Definiendo la neuropsicología forense

La neuropsicología forense hace referencia a las aplicaciones del conocimiento de la rama de neuropsicología en asuntos legales. Los expertos en esta disciplina ofrecen durante los juicios su testimonio sobre personas que tengan algún tipo de daño o disfunción cognitiva. Por lo tanto, este profesional toma protagonismo en los casos donde la persona que sufre el daño pide una compensación por este.

En la historia, los psicólogos comienzan a adquirir protagonismo como testigos en ámbitos legales en 1960 gracias al juicio emblemático: Jenkins vs EE.UU. Aquí la corte de apelaciones del Distrito de Columbia reconoce que pueden ser útiles en el peritaje de la enfermedad mental.

Aun así, la psicología forense no apareció hasta principios de los años 80, relacionándolo especialmente con los siguientes factores:

  • El aumento de las investigaciones sobre la relación entre conducta y cerebro, a través de métodos cuantitativos.
  • Las estrategias de interpretación para inferir la presencia, tipo y localización de una patología neurológica.
  • Toma de decisiones como la determinación de una discapacidad.
  • Descripción de perfiles conductuales y cognitivos característicos de cada una de las enfermedades neurológicas.
  • Implicaciones de los daños en el funcionamiento psicosocial.
  • Determinación de un pronóstico.
  • Decisiones sobre las intervenciones más adecuadas.

¿Cuál es el objeto de estudio de la neuropsicología forense?

Como explicamos anteriormente, la neuropsicología forense traslada los modelos, la metodología, la instrumentación y el conocimiento de la neuropsicología clínica a un contexto jurídico.

Toma ideas y roles principalmente del ámbito forense, gracias a los problemas y situaciones que debe enfrentar. Es decir, en el objetivo que tienen no importa tanto si la persona presenta o no alteraciones cognitivas, sino cómo estas dificultades afectan al suceso específico que se está considerando legalmente.

Se ha determinado que las principales tareas del neuropsicólogo forense en causas civiles y criminales son las siguientes:

  • Determinar la disfunción de la persona
  • Establecer el efecto de la disfunción en la vida diaria de la persona
  • Pronunciarse respecto a los pronósticos que se pueden derivar de este déficit.
  • Establecer la relación entre la causa que se esté juzgando y la disfunción consecuente.

Por lo tanto, el objetivo de esta disciplina es realizar una identificación sensible y fiable de trastornos. Iniciando con una descripción de los mismos y estableciendo una relación con el sistema nervioso central. Asimismo, puede dar recomendaciones futuras en las que se incluyan evaluación y tratamiento.

Informes neuropsicológicos: ¿hay diferencia entre los de la rama clínica y la forense?

El informe neuropsicológico se escribe cuando ya se ha hecho la valoración. A través de él se indican todos los resultados encontrados durante la evaluación. Aun así, es importante aclarar que dependiendo la rama de neuropsicología tienen un fin y componentes diferentes. A continuación, expondremos los puntos en común y los que son diferentes.

Para comenzar, iniciaremos con los puntos en común.

  • Historia clínica: en esta se reporta los antecedentes médicos y de su desarrollo social.
  • Especificidad de la lesión: se informa del lugar en el que produjo la lesión y de los agentes que la generaron.
  • Alteraciones: se muestran los resultados de la valoración relacionado con las dificultades que se pueden presentar a nivel cognitivo, emocional y social. De igual manera, se determina la gravedad de la lesión.
  • Pronóstico y rehabilitación: en este caso se reporta cual puede ser la previsión respecto al daño cerebral. Además, se debe plantear algunas recomendaciones para seguir.

Aun así, también existen unas diferencias importantes respecto al informe de neuropsicología forense. En este último se debe incluir en primer lugar la indicación causal entre la lesión y los cambios que se dieron por la misma. Especialmente, se deben especificar los cambios relacionados con las afectaciones en el desarrollo de su trabajo y de las actividades que en casa.

En segundo lugar, se debe determinar el nivel de discapacidad que presenta el afectado para realizar las actividades anteriormente dicha. Se deben mostrar explícitamente las dificultades que pueden tener en el trabajo o la imposibilidad para realizar el mismo.

Por último, es necesario indicar si estas secuelas son estables, tiene posibilidad de mejorar o por el contrario pueden agravarse. De esto dependerá que tipo de compensación o afectaciones pueden tener a largo plazo.

Campos de aplicación de la neuropsicología forense

Esas aplicaciones se pueden dividir en dos grandes áreas del derecho. Durante los procesos en estas ramas puede tener un impacto importante dentro de los veredictos dictaminados dentro en un juicio o negociación.

Derecho laboral y civil

En este caso se puede incluir varios aspectos:

  • Incapacidad civil o interdicción. En este caso, la valoración realizada aporta información sobre las facultades afectadas y sus consecuencias funcionales. Indicando si es necesario establecer una incapacitación de la persona.
  • Valoración de minusvalías, secuelas y daños. Es el campo dónde más importancia tiene la valoración por parte de neuropsicología forense. En este caso, se encarga de evaluar las secuelas cognitivas y emocionales, producidas por un daño cerebral adquirido. Puede ser impulsada por motivaciones y consecuencias jurídicas, ya que por este dictamen puede recibir algún tipo de compensación o cambio del estatus laboral.
  • Determinación de incapacidad laboral. En este caso ayudan a determinar la existencia de secuelas a nivel cerebral. Asimismo, debe explicar la influencia que estos daños puede tener sobre las habilidades y capacidades laborales.

Derecho penal

El derecho penal, es la otra área del derecho donde la neuropsicología está ganando terreno. De manera específica, cuando aparecen patologías relacionadas con el daño cerebral. 

Además, puede identificar sintomatología poco frecuente que no sea causada por patologías neurológicas. Entre ellas podemos incluir: las simulaciones o el aumento de déficits cognitivos por trastornos psiquiátricos. Entre las principales áreas de trabajo están:

  • Capacidad para enfrentar un juicio. Para este aspecto, el neuropsicólogo ayuda a objetivar la presencia y magnitud de dificultades conductuales y cognitivas. Asimismo, debe indicar si estas pueden interferir en el cumplimiento de las actividades legales.
  • Responsabilidad criminal. Aquí el rol es dar información que refute o demuestre que algunos problemas cognitivos. Todo esto puede condicionar a que la persona comprenda o no la criminalidad de la actividad. Además, si esta persona se puede hacer responsable de dirigir su conducta respecto al acto criminal del que se le puede estar acusando.
  • Valoración de las víctimas. en esta función la valoración se enfoca en conocer las consecuencias cerebrales que pueda tener una persona a partir agresiones recibidas por terceros.

Para terminar, es importante entender que la neuropsicología forense, pese a ser una disciplina reciente, ha tenido un impacto importante en su área de trabajo. Es así porque el funcionamiento de nuestro cerebro puede repercutir de manera notable en las decisiones que se pueden tomar dentro de uno proceso legal, en muchos casos condicionando el sentido de un veredicto.Te podría interesar…

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/neuropsicologia-forense/

Alexander Luria, biografía del pionero de la neuropsicología

POR: GEMA SANCHEZ CUEVAS

Alexander Luria es uno de los psicólogos más importantes de la historia. Encontró varios de los puentes que comunican a la neurología con la psicología. Su obra representa un hito, y durante años ha sido la principal referencia en la mayoría de facultades del planeta. 

Alexander Luria fue quizás el primer neuropsicólogo en el sentido estricto de la palabra. Esta rama del saber une los conocimientos de la neurología con los de la psicología, algo que hoy en día parece obvio, pero que hace menos de un siglo resultaba exótico.

La gran inspiración de Alexander Luria fue Lev Vygotsky, a quien conoció en Moscú cuando apenas comenzaba su carrera. Fue tal la influencia que ejerció sobre Luria que suele decirse que las obras de estos dos hombres son inseparables y que la una fue un desarrollo sin precedentes de la otra.

Lo cierto es que Alexander Luria es considerado por muchos el primer investigador que le dio coherencia plena a los hallazgos sobre el sistema nervioso y su nexo con la conducta. Sus aportes fueron definitivos para darle profundidad a un campo del conocimiento que apenas nacía en el siglo XX.

Hablar es un milagro”.

-Alexander Luria-

La formación de Alexander Luria

Alexander Luria nació el 16 de julio de 1902 en Kazán, Rusia. Su madre era Eugenia Victorovna Haskin, una dentista, y su padre Roman Albertovich Lúriya, un médico. Los dos eran judíos y le dieron a su hijo una buena educación. Alexander hablaba varios idiomas y heredó el amor por la ciencia de sus padres.

Luria comenzó la etapa escolar a los 7 años, pero tuvo que interrumpirla por la Revolución Rusa. Años después se formó como médico en la Universidad de Kazán, a donde ingresó cuando tenía 16 años. Después se doctoró en psicología, en el Instituto Médico de Moscú en 1921.

En 1922, Alexander Luria ayudó a crear la Sociedad Psicoanalítica de Kazán. Por ese entonces, sus lecturas estaban centradas en las obras de Freud y Jung. Más tarde inició su carrera como profesor en la Academia de Ciencias Psicológicas de la entonces Unión Soviética.

Conoció a Vygotsky en un congreso de psiconeurología en 1924. Después, los dos trabajaron en el Instituto de Psicología de Moscú, del cual Luria era secretario. Vygotsky se convirtió en su mentor y pronto comenzaron a producir los frutos de ese afortunado encuentro.

La neuropsicología

Alexander Luria se pronunció de forma crítica frente a las teorías de Pavlov en 1925. Esto hizo que fuera apartado de la élite científica de la Unión Soviética hasta después de la muerte de Stalin. Luria comprendió que sus posturas frente a la sociedad y la cultura no tenían cabida en el régimen dictatorial y por eso se dedicó al estudio del cerebro.

En aquel entonces primaba el llamado “localizacionismo”, una postura en la que el interés central era descubrir qué área del cerebro hacía qué. Luria tenía una visión diferente. Propuso la acertada idea de que no eran los fragmentos del cerebro los que realizaban las funciones, sino que estas eran frutos de sistemas funcionales complejos.

Luria enfocó gran parte de su atención en el estudio del lenguaje. En concreto, se interesó por desentrañar lo que ocurría en los casos de afasia. Este es un trastorno del lenguaje que se caracteriza por la dificultad o imposibilidad para comunicarse. Alexander Luria pretendía establecer la relación entre este trastorno y el pensamiento.

Una obra pionera

Durante la Segunda Guerra Mundial, Alexander Luria fue enviado a un hospital militar del frente en Kisegach. Allí tuvo la oportunidad de observar, de primera mano, los efectos de las lesiones cerebrales sobre las capacidades y la conducta. Muchos de los soldados llegaban a él con heridas en la cabeza y, en medio de esas atroces circunstancias, pudo avanzar en sus planteamientos.

Luria elaboró test para evidenciar los efectos de las lesiones sobre la cognición. A partir de estos identificaba los trastornos cognitivos y señalaba su localización para que fueran intervenidos por los neurocirujanos. También pudo explorar con más profundidad los efectos de las lesiones sobre el lenguaje.

Al terminar la Guerra, Alexander Luria siguió investigando la relación entre lenguaje y pensamiento, pero ahora se enfocó en los niños con discapacidad intelectual. En 1968, su nombre comenzó a formar parte de la Academia de Ciencias de los Estados Unidos. Vivió en Moscú hasta su muerte, de un ataque al corazón, en 1977, a los 75 años.

Los hallazgos de Alexander Luria quedaron plasmados en libros como Sensación y Percepción (1975); El papel del lenguaje en el desarrollo de la conducta (1979); Lenguaje y comportamiento (1984); Desarrollo histórico de los procesos cognitivos (1987); Conducta verbal (1988) y El cerebro en acción (1988).

Su obra ha sido fundamental para la comprensión del cerebro y el diseño de técnicas para la rehabilitación.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/alexander-luria/

¿Qué es la sinestesia en psicología?

POR: VALERIA SABATER

«La música tiene el color del arcoíris y las rosas huelen a azul». La sinestesia es uno de los fenómenos neurológicos más asombrosos y cada persona lo experimenta de una manera. Te damos toda la información al respecto.

Oler la música. Sentir que los colores emiten sonidos. Leer y percibir que ciertas letras son de color azul, rojo o amarillo. La sinestesia en psicología es uno de los fenómenos neurológicos más asombrosos y una característica que definió a figuras como Vincent Van Gogh. Se asocia con la creatividad, pero no deja de ser, en ocasiones, una experiencia algo turbadora.

Ser sinestésico es como tener una mente con múltiples universos paralelos que reaccionan de forma inesperada. Cualquier estímulo puede provocar, de pronto, experiencias sensoriales arbitrarias a causa de un error en el cerebro. Hay un exceso de conexiones neuronales y ello deriva en fallos y alternancias a la hora de procesar la información.

Esta característica se llama «integración multimodal» y define a una pequeña parte de la población. Enseguida, te ofrecemos toda la información.

La sinestesia involucra cualquier combinación de los sentidos y esto conlleva a la aparición de más de 100 subtipos de esta característica neurológica.

¿Qué es la sinestesia en psicología?

La sinestesia en psicología es una condición neurológica en la cual se combinan uno o varios sentidos. Trabajos como los publicados en la revista PLoS Biology indican que la incidencia está entre el 2 % y el 4 % de la población; además, definen esa experiencia en la cual un estímulo provoca sensaciones inesperadas, como escuchar colores o saborear palabras.

Los autores de esta misma investigación resaltan que el origen del fenómeno tiene una base neural concreta. Siempre se aprecia una activación cruzada o, como se mencionó, una integración multimodal. Es decir, hay un exceso de conexiones neuronales y esto hace que varios sentidos se activen a la vez, a la hora de procesar un estímulo.

Se sabe que la sinestesia tiene una base genética: se hereda de padres a hijos. Es más, la revista PNAS dispone de una interesante exploración sobre el origen de esa conectividad excesiva. La clave estaría en una alteración genética, la cual explicaría, por ejemplo, que en una familia evidencien la misma variedad de sinestesia sonido-color.



¿Cuáles son los principales tipos de sinestesia?

Este dato puede sorprender a cualquiera, pero se han descrito sobre 164 tipos potenciales de sinestesia. Esto mismo es lo que nos señala una investigación de la Universidad de Sussex. Si tenemos en cuenta todas las combinaciones que pueden generar los cruces entre diferentes sentidos y los estímulos, los resultados son asombrosos.

Ahora bien, para su correcto análisis es necesario agruparlas. Esto reduce bastante el número. No obstante, y como curiosidad, podemos encontrarnos con la sinestesia de personalidad, en la cual uno ve a cada persona con un color determinado. Exploremos, a continuación, las diferentes tipologías.

Sinestesia grafema-color

En la sinestesia grafema-color una persona puede ver la letra «A» de color azul y la letra «B» de color verde. Es decir, cada letra evoca un tipo de tono cromático. La Universidad de Edimburgo publicó un trabajo en la revista Frontiers in Human Neuroscience, describiendo una interesante investigación con 600 niños al azar, para descubrir cómo madura este tipo de sinestesia con los años.

Sinestesia auditivo-visual

La sinestesia auditivo-visual se conoce también como chromesthesia.  Es una condición en la cual una persona ve colores al escuchar música o sonidos al azar. Es una experiencia intensa y estimulante que definió a notables artistas como Paul Klee o Wassily Kandisnky o a cantantes actuales como Lady Gaga.

Las personas con sinestesia auditivo-visual presentan un mayor pensamiento lateral.

Sinestesia léxico-gustativa

¿Te imaginas leer ciertas palabras o escuchar determinados sonidos y que, de pronto, sientas el sabor de un helado de fresa o de un té de menta? La sinestesia léxico-gustativa hace que una persona sienta sabores al exponerse a estímulos auditivos. Son hechos neurológicos particulares que hacen únicos a quienes evidencian esta condición.

Sinestesia tacto-espejo

En el mundo de la sinestesia en psicología hay una experiencia que, en especial, llama la atención. En la sinestesia tacto-espejo es posible tener la misma experiencia física que otra persona que observamos. Si estás con una amiga que se rasca la frente, sentirás el tacto de esos dedos en la tuya. Si ves una película donde un actor acaricia a una actriz, tú experimentarás esa caricia.

La sinestesia en psicología y la modalidad tacto-sonido

La sinestesia tacto-sonido o audio-táctil traza un fenómeno de lo más estimulante: experimentar sensaciones al escuchar sonidos. Es algo parecido al clásico ASMR. A veces, al exponernos a ciertas músicas o determinados sonidos, sentimos cosquillas caricias o como si una pluma pasara por nuestra piel.

Sinestesia de teletipo o tickertape

La sinestesia de teletipo o tickertape sería difícil de creer si no dispusiéramos de documentación científica. La revista Cognitive Neuroscience detalla esta tipología. Hay personas que, al pensar o escuchar a otros hablar, ven en sus mentes subtítulos o palabras físicas transcribiendo esas experiencias auditivas.

Los autores destacan que estamos ante un tipo de sinestesia con derecho propio y que no se relaciona con la sinestesia grafema-color.

La ciencia ha descubierto que la sinestesia también se puede desarrollar mediante entrenamiento.



Personas con sinestesia: ¿cómo son?

La sinestesia en psicología es una experiencia interesante por varios aspectos. Primero, conforma uno de los fenómenos neurológicos no patológicos más llamativos. Segundo, es común que los sinestésicos evidencien una característica similar: la creatividad

La Universidad de Berna, en Suiza, destacó este mismo dato en una investigación: hay un vínculo entre ser sinestésico y dedicarse al arte. Ahora bien, parece que quienes más destacan en estas áreas son aquellos que muestran la tipología «auditivo-visual».

Así, quienes al exponerse a estímulos auditivos ven extraordinarios colores a su alrededor y se involucran más en tareas creativas. De hecho, demuestran en mayor grado creatividad divergente. Es decir, evidencian una forma de pensar más innovadora, desafiante y no lineal.

Como dato curioso y, para finalizar, la sinestesia en psicología tiene ahora un nuevo ámbito de futuro. Indagaciones como las publicadas en la revista Naturenos recuerdan que, si bien esta condición neurológica es congénita, se puede entrenar. Es decir, podemos aprender a tener experiencias sinestésicas. ¿A quién no le gustaría?

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/que-es-la-sinestesia-en-psicologia/

¿Cómo funciona la mente humana?

POR: VALERIA SABATER

La mente crea la realidad en la que vives y traza cada uno de tus pensamientos. ¿Cómo funciona? ¿Es una entidad diferente al cerebro? En el siguiente artículo clarificamos toda la información sobre este interesante tema.

Uno de los mayores misterios que la filosofía, la psicología y la neurociencia intentan resolver es cómo funciona la mente humana. El filósofo John Locke dijo una vez que la mente de un bebé es como una pizarra en blanco. Sigmund Freud comparó esta entidad con un mecanismo invisible de sistemas hidráulicos y electromagnéticos.

En la actualidad, psicólogos cognitivos como Steven Pinker nos dicen que la mente es una computadora neuronal. Concebir esta idea permite separarla del cerebro y verla como una entidad que hace fluir la información y definir, a su vez, la persona que somos. Podríamos decir que es la «energía» servida del propio encéfalo, del cuerpo y del entorno, para sacar conclusiones y sobrevivir.

Estamos ante un tema tan interesante como complejo en el que vale la pena profundizar. Durante esta lectura encontrarás toda la información al respecto.

La mente es como un iceberg, flota con una séptima parte de su volumen sobre el agua.

Mente y cerebro no son lo mismo

La mente es la entidad que lleva a cabo todos nuestros procesos psicológicos. En ella fluyen esos complejos y maravillosos sistemas como el motivacional, el afectivo, el conductual y el perceptivo, necesarios para actuar, aprender y comprender lo que nos envuelve.

Ahora bien, es importante matizar que mente y cerebro no son la misma entidad. Es evidente, eso sí, que la primera no sería posible sin el segundo.

La mente emerge en el momento en que un cerebro alcanza suficiente sofisticación biológica. Tal y como explica un trabajo publicado en Perspectives on Psychological Scienceel propio futuro de la psicología necesita de esa visión, en la cual entender que mente y cerebro están conectados, pero la mente lleva a cabo sus propias funciones. ¿Cuáles son las sutiles diferencias?

  • La mente es una entidad abstracta que integra la conciencia e infinidad de procesos cognitivos.
  • El cerebro es su soporte biológico, esa área del sistema nervioso central resultado de nuestra evolución.
  • La mente no está en un lugar físico y concreto, sino que se manifiesta a través de redes neurológicas y se desarrolla mediante nuestra experiencia e interrelación con el contexto que nos rodea.
  • El cerebro puede desarrollar enfermedades y sufrir traumatismos; las alteraciones de la mente no se pueden observar. Ello explica que las etiquetemos como «trastornos mentales» y sea la psicología la que aborde dichas condiciones.
  • La mente modifica el cerebro. Aquello que pensamos y sentimos puede alterar su anatomía y conectividad. Ejemplo de esto mismo lo tenemos en la propia psicoterapia. Como reseña un artículo en el Indian Journal of Psychiatrylos procesos terapéuticos tienen la posibilidad de modificar nuestro universo neurológico y esto es algo frecuente al abordar los traumas.


Tu mente consciente y tu mente inconsciente: dos modos de funcionamiento

Si alguna vez te has preguntado cómo funciona la mente humana, te interesará saber que lo hace básicamente de dos modos: de forma consciente e inconsciente. Y la última de ellas resulta de lo más fascinante. La razón estriba en que buena parte de lo que haces cada día de forma automática lo lleva a cabo tu mente inconsciente.

El Journal of the Association for Psychological Science resalta que quizás esto nos llame un poco la atención, porque arrastramos aún algunos sesgos sobre este constructo psicológico. Al pensar en el término «inconsciente» visualizamos casi al instante las teorías de Sigmund Freud.

Lo cierto es que este estrato mental aglutina todas esas tareas automáticas efectuadas de forma frecuente y que no requieren de un procesamiento de la información activo y consciente. Es más, en el Neuroscience of Consciousnessacotan que hasta hay aprendizajes muy simples integrados gracias a este mecanismo. ¿Distinciones entre tu mente consciente e inconsciente? Las siguientes.

Funciones de la mente consciente

  • Autoconciencia.
  • Memoria de trabajo.
  • Control de impulsos.
  • Toma de decisiones.
  • Autocontrol emocional.
  • Imaginación y creatividad.
  • Resolución de problemas.
  • Razonamiento lógico y reflexión.

La intuición es un proceso que lleva a cabo nuestra mente inconsciente al almacenar toda nuestra experiencia. Gracias a ella tomamos decisiones rápidas en ciertos momentos.

Funciones de la mente inconsciente

  • Intuición
  • Almacenamiento de recuerdos.
  • Algunos aprendizajes como los basados en la asociación de estímulos.
  • Procesamiento automático de la información como reconocimiento facial y de patrones, además de estímulos recibidos.
  • Procesamiento de hábitos y habilidades motoras. Ejemplo de ello es aprender a escribir o ir en bicicleta. Una que practicamos lo suficiente, estas actividades se llevan a cabo de modo automático e inconsciente.


Teorías sobre cómo funciona la mente humana

La ciencia aún no clarifica con exactitud cómo funciona la mente humana.Seguimos debatiéndonos con una gran diversidad de enfoques y perspectivas que no hallan un consenso claro y riguroso entre los propios expertos. Basta recordar lo que sucedió con el libro How the mind works de Stephen Pinker.

Las tesis de este psicólogo experimental, científico cognitivo, levantó el revuelo de muchos colegas de profesión. No hay unanimidad a la hora de concebir qué es la mente ni cómo trabaja. Ello explica por qué, para tener una idea más o menos general del tema, vayamos a las teorías que la enmarcan. A continuación, esas diferentes perspectivas sobre cómo funciona la mente.

Teoría computacional

El modelo computacional de la mente partió de la teoría de Noam Chomskyy su gramática generativa. Según este reconocido lingüista, hay unas reglas innatas que explican la facilidad con la que todos aprendemos el lenguaje desde pequeños. Esas reglas partirían de nuestra capacidad natural y automática para reconocer símbolos.

En esta dimensión la mente no se ve como un ordenador, sino como un sistema que manipula símbolos complejos. De hecho, se equipara a la máquina que construyó Alan Turing en su momento.

  • Una computación es un conjunto de reglas que articulan y procesan cada estímulo que recibimos, dándole un significado.
  • Para este modelo, la forma en que funciona la mente humana es similar a un dispositivo que crea símbolos de modo constante. Gracias a ellos comprendemos el mundo y nos movemos por él.

Teoría del procesamiento de la información y cómo funciona la mente

La teoría del procesamiento de la información describe la mente humana como un ordenador en el cual toda información se registra, se codifica y se almacena. Libros como Human information processing (1972) de Peter H. Lindsay y Donald A. Norman, asentaron las bases de la psicología cognitiva al ver al humano como un ser que se limita, básicamente, a procesar información.

  • Para esta teoría la mente sería el software y el cerebro el hardware.
  • Desde esta perspectiva, la fase más decisiva está en esa etapa contenida entre el momento en que recibimos un estímulo y emitimos una respuesta. El modo en que elaboramos y manejamos cada dato, sensación o experiencia es algo decisivo.

Teoría de la mente modular

Una hipótesis más sobre cómo funciona la mente humana es la que expuso Steven Pinker en su libro y que tiene una larga tradición en psicología. Para la teoría modular la mente se organiza en módulos, en diferentes estructuras especializadas.

Este modelo se nutre de la psicología evolutiva y dice, que al igual que nuestro cuerpo la mente es el resultado de la evolución. Con el tiempo integramos nuevas colecciones de dominios y habilidades mentales para adaptarnos mejor al entorno.

Lo que pensamos determina lo que nos sucede, por lo que, si queremos cambiar nuestras vidas, necesitamos estirar nuestras mentes.

Hay más luz sobre cómo funciona la mente, pero aún falta

Aunque la investigación científica ha dado luz a muchos misterios del cerebro y la mente, lo que nos queda por saber supera a las respuestas de las que disponemos. El universo mental carece de materia, no es un entramado de neuronas en el interior de una cavidad craneal. Es una dimensión sin forma, pero tan poderosa que define lo que somos y el modo en que procesamos la realidad.

Es muy posible que en los próximos años se aclaren más datos y la propia comunidad de expertos encuentre esa sintonía desde la cual dejar la confrontación y ofrecernos unas explicaciones más precisas.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/como-funciona-la-mente-humana/

La relación entre el cannabis y la esquizofrenia

POR: VALERIA SABATER

Si bien el cannabis se ha utilizado durante siglos por la humanidad, a menudo descuidamos el impacto que tiene sobre el cerebro de las personas más jóvenes. Lo analizamos en el siguiente artículo.

¿Qué relación existe entre el cannabis y la esquizofrenia? Quizás has escuchado alguna vez que la marihuana o su psicoactivo, el THC, está detrás de esta enfermedad mental grave. Bien, lo primero es aclarar que esta droga depresora no genera por sí misma dicho trastorno mental. No obstante, puede activarlo en quienes ya presentan una predisposición genética.

El cannabis es una de las sustancias psicoactivas más consumidas entre los adolescentes y adultos jóvenes. El uso persistente en personas con un cerebro aún inmaduro y en desarrollo, sí puede presentar riesgos y efectos secundarios preocupantes.

Si bien estamos ante un compuesto con una larga tradición en nuestras culturas, cuya administración es legal en algunos países, es importante conocer sus contraindicaciones.

Según diversos estudios, las personas con esquizofrenia son las que más abusan del consumo de cannabis debido a su efecto relajante.

Cannabis: qué es y cuáles son sus efectos

El cannabis o marihuana define a un grupo de tres plantas con propiedades psicoactivas: cannabis sativa, cannabis indica y cannabis ruderalis. Cuando sus hojas, tallos o flores se secan se procede a su consumo con el fin de beneficiarse de sus efectos relajantes. Ello explica su utilidad tanto recreativa como médica.

Por otro lado, es interesante saber que el cannabis contiene más de 120 componentes o cannabinoides. Pero la ciencia aún no conoce con exactitud la funcionalidad o efectos de todos. Hasta el momento, las industrias farmacéuticas focalizan su interés en dos sustancias claves que son las siguientes:

  • El tetrahidrocannabinol (THC) es el principal psicoactivo del cannabis.Es el responsable del clásico «subidón», debido a la estimulación que genera en las neuronas para que liberen dopamina.
  • El CBD. Se usa para aliviar la inflamación y el dolor; sin embargo, estudios como los publicados en la revista Neuropsychopharmacology argumentan que aún no se comprenden con exactitud los mecanismos de este cannabidiol y necesitamos, por tanto, de más investigaciones al respecto.


¿Qué efectos tiene la marihuana?

El cannabis se considera una droga «inofensiva» con gratificantes efectos relajantes, aunque su aparente inocuidad es algo que la literatura científica lleva décadas dudando. Un estudio reseñado en A Journal of Cerebral Circulationpone el foco en quienes más recurren a esta sustancia: los jóvenes.

El impacto que tiene en el cerebro, en caso de un consumo prolongado, llega a ser muy nocivo. Analicemos, no obstante, cómo reacciona el cuerpo y la mente bajo los efectos de la marihuana.

Efectos a corto plazo

  • Mareos.
  • Relajación.
  • Alivio del dolor.
  • Sensación de bienestar.
  • Incremento de la creatividad.
  • Sensorialidad alterada.
  • Variación de la percepción espacio-tiempo.

Efectos a largo plazo

  • Náuseas.
  • Letargia.
  • Irritabilidad.
  • Broncodilatación.
  • Problemas para dormir.
  • Problemas de memoria.
  • Episodios psicóticos.
  • Aumento de la ansiedad.
  • Alteraciones en la atención.
  • Bajada de la presión arterial.
  • Incremento de la agresividad.
  • Lentitud en el tiempo de reacción.
  • Dificultades para procesar la información.
  • Investigaciones como las realizadas en el Hospital de Sant Pau, de Barcelona, en España, destacan que pueden aparecer efectos adversos agudos y crónicos tanto en la salud física como en la mental.
  • El cannabis o marihuana puede convertirse en una droga adictiva. Estudios como los publicados en Journal of Neuroimmune Pharmacology,nos indican que los cambios neurobiológicos de esta sustancia son semejantes a otras adicciones, aunque eso sí, con menor impacto cerebral.

El consumo de cannabis se eleva cada año entre los jóvenes de sexo masculino entre los 16 y 25 años. Esto se traduce en un incremento de las tasas de esquizofrenia, puesto que el THC actúa como disparador de la enfermedad, en caso de que la persona ya presente una predisposición genética de base.

Cannabis y esquizofrenia: usos y riesgos

Cannabis y esquizofrenia conforman una variable de gran interés para el campo de la psicología, la psiquiatría y la neurociencia. A menudo, se refuerza la idea de que el consumo persistente de esta droga actúa como disparador de esta enfermedad mental.

Como se dijo al inicio, la marihuana puede resultar peligrosa en caso de que la persona tenga ya una predisposición genética hacia la esquizofrenia. Lo analizamos en detalle.



Cannabis y la esquizofrenia en los hombres

El consumo de cannabis es un factor de riesgo demostrado para jóvenes de entre 16 a 25 años. Disponemos de estudios muy recientes como los publicados en la revista Psychological Medicinedonde nos aportan una información significativa que debería tenerse muy en cuenta. Sobre todo, de cara a los procesos de legalización de la marihuana que muchos países ponen en práctica.

Esta investigación realizada con 6.907.859 personas nos dice que la quinta parte de los casos de esquizofrenia entre hombres jóvenes podría prevenirse evitando el consumo de cannabis.

  • El consumo de marihuana es en especial significativo entre los jóvenes de sexo masculino. Son ellos los que desarrollan en mayor grado este trastorno psiquiátrico, siempre y cuando presenten una predisposición genética.
  • El trastorno por consumo de cannabis se ha elevado en los últimos años. Esto es un factor de riesgo para que el incremento de pacientes con esquizofrenia también aumente, dado que el THC actúa como disparador en los casos ya señalados.
  • Asimismo, es pertinente tener en cuenta que el THC puede desencadenar y/o empeorar la propia esquizofrenia, en caso de que el paciente ya la haya desarrollado. Recordemos que este trastorno psiquiátrico muestra su sintomatología entre los 18 y 25 años, por término medio.

¿Por qué las personas con esquizofrenia consumen cannabis?

Es muy frecuente que los pacientes diagnosticados con esquizofrenia fumen marihuana por sus efectos relajantes. Muchas personas dicen sentirse más centradas, con una mayor sensación de bienestar y calma interna. Esa percepción les hace creer también que, gracias al cannabis, se reducirán los episodios psicóticos.

Ahora bien, la comunidad científica ya ha visto a través de diversos estudios que esta percepción es errónea. Dado que los compuestos del cannabis son un elemento de gran interés para la industria farmacéutica, se indaga su uso terapéutico en este sector de la población.

Todavía no hay pruebas concluyentes de que el cannabis tenga un beneficio positivo sobre los síntomas y la cognición de los pacientes con esquizofrenia (Ahmed et al. 2021). Necesitaríamos de más estudios que se focalizaran en analizar mejor las dosis, la forma de administración o las características de los propios enfermos.

La comunidad científica entiende que se necesita de mayor investigación para comprender los beneficios terapéuticos del cannabis. Sin embargo, su legalización puede poner en riesgo a numerosos colectivos; como es el caso de los jóvenes con cerebros aún inmaduros que presenten un consumo continuado.

El cannabis como terapia psicodélica

Conocemos ya el vínculo entre el cannabis y la esquizofrenia y somos conscientes, a su vez, del riesgo de consumir de manera continuada esta droga psicoactiva. Pero ¿qué hay de su utilización terapéutica? Muchos pacientes con dolor crónico o que están en quimioterapia se benefician de la administración de marihuana.

Además, en los últimos años el cannabis también forma parte de la terapia psicodélica, al igual que el MDMA, la psilocibina y la ayahuasca. Son modelos terapéuticos asistidos por especialistas, en los cuales el paciente está en todo momento en un contexto clínico controlado.

La administración del cannabis parte de microdosis muy puntuales, con el fin de abordar historiales de trauma o estrés postraumático. Frontiers in Psychiatry describe los beneficios en un caso y destaca, a su vez, la necesidad de incrementar las exploraciones en este campo, sobre todo en casos más graves como los traumas complejos. Estaremos pendientes de más avances.Te podría interesar…

Leerlo en La Mente es Maravillosa

9 preguntas que solemos hacernos sobre la esquizofrenia

Hay preguntas que solemos hacernos sobre la esquizofrenia y que vale la pena responder. Sobre todo, para desterrar falsos mitos.

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/la-relacion-entre-el-cannabis-y-la-esquizofrenia/

Impacto de los esteroides anabólicos en el cerebro

POR: VALERIA SABATER

El uso indebido de los esteroides anabólicos puede alterar por completo la producción y liberación de neurotransmisores. Esto tiene un gran impacto en la salud mental y en la funcionalidad cerebral.

Los esteroides anabólicos no solo tienen un impacto en el organismo de quien lo consume: el cerebro también se ve afectado. Cambios en el estado de ánimo, depresión, ansiedad y hasta deterioro cognitivo son consecuencias. Además, mientras la anatomía física adquiere un mayor volumen muscular, muchas áreas neurológicas pierden conectividad y envejecen de manera prematura.

No todos los que consumen estas versiones sintéticas de la testosterona son conscientes de este tipo alteraciones a largo plazo. Si bien son sustancias para ayudar a pacientes infantiles con trastornos genéticos, su administración, más allá del ámbito médico y por razones clínicas, resulta peligrosa. Conozcamos más datos sobre este tema, a continuación.

Las personas que consumen esteroides en dosis excesivas pueden experimentar una sintomatología asociada a la depresión, la ansiedad y las reacciones psicóticas.

¿Qué son los esteroides anabólicos?

Cada vez que escuchamos este término lo asociamos casi de inmediato el mundo del deporte y el fitness. Sin embargo, cabe decir que estas sustancias sintéticas se usan desde hace mucho tiempo para tratar condiciones como el síndrome de Turner y otros retrasos del crecimiento.

Ahora bien, si hay un colectivo que de manera tradicional interesa por estos productos son algunos atletas y los fisicoculturistas.

Los esteroides anabólicos son versiones sintéticas de la testosterona, la hormona sexual masculina. Su principal efecto es el anabolizante, es decir, incrementa la masa muscular y el rendimiento físico. Así, tal y como nos indican en un trabajo publicado en la revista Healthcarese estima que cerca del 1 % y el 3 % de la población de Estados Unidos los utiliza, pasando por alto sus efectos secundarios.

Sabemos, por ejemplo, que a corto plazo estos fármacos incrementan la fuerza entre un 5 % 20 %, así como elevan el volumen de la masa corporal magra. No obstante, sus efectos a largo plazo ya no son tan destacables. Estas sustancias artificiales alteran todos los tejidos y órganos del cuerpo, incluyendo el cerebro. 



¿Cuáles son los efectos más comunes para la salud?

El consumo indebido de estos esteroides ocasiona diferentes problemas de salud importantes de considerar. Los listamos enseguida:

  • Acné.
  • Hipertensión.
  • Colesterol alto.
  • Caída del cabello.
  • Problemas renales.
  • Dolor de estómago.
  • Retención de líquidos.
  • Crecimiento de los senos.
  • Riesgo de cáncer de próstata.
  • Posibles infartos de miocardio.
  • Menor tamaño de los testículos.
  • Aparición de coágulos de sangre.
  • Bajo recuento de espermatozoides.

Síntomas de dependencia asociados a los esteroides anabólicos

La dependencia a estos fármacos es más frecuente de lo que pensamos. El problema es que quien los consume busca ayuda para los efectos físicos, pero no para los psicológicos o su adicción a estas sustancias.

La Universidad de Oslo señala a través de un trabajo que, por lo general, dichas personas renuncian a buscar opciones de tratamiento en esta área. Ahora, veamos la sintomatología asociada a la dependencia.

  • Cansancio.
  • Sudoración.
  • Nerviosismo.
  • Mayor agresividad.
  • Pérdida del apetito.
  • Alteración del sueño.
  • Problemas cognitivos.
  • Falta de deseo sexual.
  • Irritabilidad y agresividad.
  • Cambio en el estado de ánimo.
  • Necesidad de elevar la dosis debido a la tolerancia.

¿Qué impacto tienen los esteroides anabólicos en el cerebro?

Levantadores de pesas, fisicoculturistas, boxeadores, velocistas. Todos recordamos el nombre de algún atleta que truncó su carrera a causa de estas sustancias. Y es que, aunque los esteroides anabólicos están prohibidos en el mundo del deporte, son muchas las personas que los consumen.

Se trata de un negocio de trastienda en los gimnasios y los jóvenes recurren cada vez más a ellos, en su deseo por lograr de forma rápida un cuerpo escultural.

Asimismo, se consideran, erróneamente, una «droga no tóxica», minimizando los serios efectos que ocasionan con el paso del tiempo.

De esta manera, si cogiéramos a uno de estos chicos y le hiciéramos una resonancia magnética cerebral, tras diez años de consumo regular de esteroides anabólicos, nos asustaríamos. Un análisis publicado en la revista científica Biological Psychiatry nos ofrece datos muy relevantes.

Consumir esteroides de esta clase durante más de 10 años tiene serios efectos para la salud física y neurológica.

Envejecimiento cerebral

Astrid Bjørnebekk, autora principal del estudio y directora del grupo de investigación de esteroides androgénicos anabólicos del Hospital de la Universidad de Oslo, resalta que el impacto de estas sustancias es inmenso. Los cambios que se aprecian son los siguientes:

  • Problemas de memoria.
  • Dificultad para reconocer patrones.
  • Reducción de la habilidad para resolver problemas.
  • Los cerebros presentan un envejecimiento más rápido.
  • La velocidad de procesamiento de la información es menor.
  • Mayor número de muerte neuronal y menor conectividad neuronal.
  • Hay cambios en el volumen y densidad de varias regiones cerebrales.
  • Alteraciones en la producción y funcionalidad de los neurotransmisores.

De la misma manera, quienes consumieron esteroides anabólicos durante más de 10 años evidenciaron una clara dependencia a estas sustancias.

Problemas psiquiátricos

El consumo de tales esteroides en pastillas, inyectables o crema, de forma mantenida en el tiempo, también impacta en la salud mental. El deterioro cerebral siempre se correlaciona con problemas psiquiátricos.

La revista Scientific Reports, por ejemplo, enfatiza que el uso de estas sustancias sintéticas se vincula con conductas de riesgo y problemas para regular la ira.

Lo más llamativo es la exhibición de comportamientos psicopáticos. Si bien este dato aún debe confirmarse con más estudios, no deja de ser un aspecto destacable. Asimismo, lo que más se aprecia a largo plazo en estas personas son los trastornos del estado de ánimo como la depresión y la ansiedad.



Terapias para tratar la adicción a los esteroides anabólicos y mejorar la salud cerebral

Los esteroides anabólicos cambian el cerebro y conducen a la persona a un estado de gran desgaste psicosocial. Esta adicción pone en riesgo la vida y condiciona en materia psiquiátrica. El nivel de agresividad revierte en el entorno y los deja atrapados en estados mentales marcados por el sufrimiento y la indefensión.

Un modo de abordar estas dinámicas autodestructivas es mediante la terapia cognitivo-conductual y la terapia de grupo. De igual manera, se recomienda el apoyo de otros profesionales médicos como los nutricionistas. Pensemos que estos hombres y mujeres recurren a muchos complementos vitamínicos, con lo cual su dieta queda alterada por completo.

Otras estrategias para favorecer la salud cerebral tras el consumo de esteroides anabólicos

El cerebro presenta una gran plasticidad. La terapia psicológica y el entrenamiento cognitivo favorecen la recuperación en pacientes adictos al consumo de esteroides anabólicos; pero también hay otras estrategias compartidas enseguida:

  • Apoyarnos en nuestro entorno.
  • Entender que puede haber altibajos.
  • Encontrar nuevos alicientes e intereses.
  • Empezar programas de estimulación cognitiva.
  • Iniciar terapia psicológica individual y de grupo.
  • Reconocer que tenemos un problema de adicción.
  • Empezar los tratamientos que recomienden los nutricionistas.
  • Dejar a un lado los estímulos que incentiven el consumo de esteroides.

Por último, y no menos importante, es necesario no rendirse y trabajar cada día por mejorar nuestra salud mental y física. El cambio siempre es posible.

FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/impacto-de-los-esteroides-anabolicos-en-el-cerebro/