«Brainwriting»: una técnica para potenciar la creatividad
POR: VALERIA SABATER
La clásica técnica de tormenta de ideas no siempre es tan beneficiosa como podrías pensar. Un recurso alternativo de gran poder (y muy útil para los introvertidos) es el que te explicamos en el siguiente artículo.
Si hay una técnica recurrente en muchas empresas es la clásica lluvia o tormenta de ideas. Seguro la conoces, consiste en que todos los miembros de un equipo aporten sus propuestas de manera grupal y en voz alta. Ahora bien, en los últimos años gana terreno un recurso alternativo en materia de creatividad: el brainwriting.
En toda organización habitan esas «gemas ocultas» que, por estar en ese espectro de personalidad más introvertida, no siempre se sienten cómodas en ciertas dinámicas de grupo. Es más, cuando trabajas con tus compañeros no es fácil aportar sugerencias y propuestas debido a factores como la mala comunicación, los desacuerdos, la ausencia de unos turnos de palabra más equitativos, etc.
La herramienta que aquí presentamos optimiza la innovación en la empresa y evita, además, todos esos inconvenientes reseñados. Te la describimos a continuación.
«La creatividad es la inteligencia divirtiéndose».
Brainwriting: definición, origen y finalidad
Brainwriting es una técnica de creatividad sustentada en la generación de ideas por escrito entre distintos miembros de un grupo de trabajo. Este modelo no es nuevo, pues lo diseñó un experto en marketing, Bernd Rohrbach, en 1969.
El objetivo es sustituir el pensamiento en voz alta del clásico brainstorming, por ese razonamiento más íntimo, profundo y meditado que facilita la propia escritura. Puede que, llegados a este punto, esta herramienta para estimular la creatividad e innovación te genere algunas preguntas.
¿Qué beneficio tiene frente a la siempre recurrida tormenta de ideas? ¿Por qué esta última debería sustituirse? Bien, fue el psicólogo organizacional Tomas Chamorro-Premuzic quien destacó las limitaciones del clásico modelo de creatividad.
Este experto internacional en perfiles psicológicos, liderazgo y gestión del talento y autor de libros como The talent delusion (2017), explicó en el Harvard Bussiness Review que empresas grandes usaron durante años la lluvia de ideas sin ser conscientes de que, en muchos casos, ofrece más perjuicios que beneficios. Analizamos esas deficiencias.
¿Por qué el brainstorming o tormenta de ideas no siempre es útil?
En una investigación divulgada por la revista Advances in Experimental Social Psychology se destaca cómo la técnica de la lluvia de ideas afecta en muchos casos a la productividad de las empresas. Para conocer las causas que orquestan este llamativo factor, es interesante profundizar en las siguientes realidades. Quizá algunas de ellas te sean familiares:
- Empleados con más talento pueden pasar desapercibidos; sobre todo, si son más introvertidos.
- Genera ansiedad social, ya que, a veces, nos inquieta que los demás juzguen nuestras propuestas.
- Se pierde mucho tiempo, puesto que es posible pasar varias horas sin que exista un aporte sólido entre todos.
- Es muy frecuente que se opte por dejar que sean los otros quienes hagan sus aportaciones y decidan. Esto termina por inducir a muchos empleados al conformismo.
- Produce una falsa sensación de eficacia, lo que significa que tenemos tan interiorizada la idea de que la tormenta de ideas es útil que no siempre se ponen en práctica nuevos enfoques.
- Nos obliga a pensar de forma muy rápida y hasta caótica. De este modo, resulta difícil meditar los razonamientos y ofrecer ideas innovadoras cuando hay tanta gente discurriendo a la vez.
¿Cuál es la finalidad del brainwriting?
Cuando Bernd Rohrbach publicó la técnica en 1968, en la revista Absatzwirtschaft, explicó que este recurso busca ser una metodología de creatividad ordenada, democrática y efectiva. La finalidad de la escritura de ideas es crear un espacio para que todas se compartan y todas las personas puedan aportar, mediante textos, visiones innovadoras.
El principal beneficio de este recurso es que ahorramos mucho tiempo y es una técnica democrática y eficaz.
¿Cómo se aplica el brainwriting?
Esta herramienta para estimular la creatividad e innovación también se la conoce como la «técnica 6-3-5». En realidad, es un recurso muy simple, económico y efectivo que toda organización debería plantearse. Si de verdad deseamos tener empresas más competitivas y aptas para adaptarse en contextos estresantes y cambiantes, estamos ante una buena propuesta.
Como se señala en un artículo publicado en la revista SAGE Open , la creatividad tendrá un impacto en el trabajo, siempre y cuando exista un apoyo organizacional claro y significativo. En este sentido, la «técnica 6-3-5» puede traer múltiples beneficios si se instaura de forma adecuada. Miremos cómo.
Elegir un moderador
El moderador es la persona encargada de dirigir cada uno de los pasos durante el proceso de creación de ideas de los equipos. Esta persona informa, guía y dinamiza. Su objetivo es que todos los miembros conozcan las metas y objetivos propuestos y se ajusten a cada pauta de esta herramienta.
Primera fase: grupos de seis personas, tres ideas, cinco minutos
La metodología consiste en la creación de grupos de seis personas que, en turnos de cinco minutos, redactan tres ideas. Para ello, el moderador lleva cabo las siguientes acciones:
- Expone el problema o un objetivo a alcanzar.
- Organiza pequeños grupos de seis personas cada uno.
- Sienta a los empleados en una mesa junto a papel y lápiz.
- Pide que creen tres ideas que estén en sintonía con lo expuesto.
- Informa a los grupos que tendrán cinco minutos para llevarlo a cabo.
Segunda fase: pasar las ideas al compañero
En el siguiente paso, las ideas escritas se las pasan un compañero para que se inicie una nueva ronda. Todos recibirán las propuestas de otra persona y, a partir de lo que lean, generan tres ideas más. El ciclo se cierra cuando los seis miembros leyeron y completaron todas las hojas de todos los compañeros.
Al final, se obtienen 108 ideas en 30 minutos y reflejadas de forma manuscrita.
Tercera fase: socialización
La herramienta para estimular la creatividad e innovación finaliza con la puesta en común de todas las ideas y la valoración de las mismas. En este punto, pasaremos ya del medio escrito a la comunicación oral, para discutir, analizar y elegir las propuestas más valiosas. Solo quedará la instauración de las mismas.
¿Cuáles son los beneficios?
Los beneficios de esta estrategia son múltiples. En un trabajo publicado por Procedia, Social and Behavioral Sciences, señalan las siguientes ventajas:
- Evita los bloqueos.
- Reduce el conformismo social.
- Disminuye los conflictos interpersonales.
- Favorece el sentido de pertenencia al equipo.
- Potencia el procesamiento de las ideas compartidas.
- Es una técnica muy ordenada que nos evita perder tiempo.
- Impide que la generación de ideas se desvíe del tema central.
- Desactiva o evita las diferencias de estatus entre los empleados.
- Deja de existir la clásica presión de ajustarse al grupo o de pensar todos lo mismo para no ser juzgados.
Dale una oportunidad al brainwriting
Si bien el brainstorming o lluvia de ideas es una herramienta de la cual algunos han obtenido buenos resultados, es importante actualizarse y entender que hay otros enfoques para sacar provecho de la creatividad.
A pesar de que Bernd Rohrbach creó el brainwriting en 1969, el potencial de esta herramienta aún no es explotado del todo, razón por la cual vale la pena considerarla cuando sea necesario. Por tanto, si tienes la oportunidad, no dudes en probarla y en corroborar sus beneficios.
FUENTE: https://lamenteesmaravillosa.com/brainwriting-tecnica-potenciar-creatividad/